20N. HACE 40 AÑOS QUE MURIO FRANCO, NO EL FRAQUISMO. (Varios: El diario, Público, Infolibre, ..)

Franco ha muerto, pero no el franquismo

Francisco Vigueras (*)

¡Españoles, Franco ha muerto! Así anunció el último presidente franquista Carlos Arias Navarro la muerte del dictador, en una televisión en blanco y negro. Era el 20 de noviembre de 1975. Han pasado 40 años desde aquella aparición televisiva del carnicero de Málaga, apodo que recibió como responsable de la brutal represión que se produjo en esta ciudad, tras haber sido tomada por los militares golpistas en 1937. Arias Navarro, de triste recuerdo para los malagueños, había ordenado fusilar a más de 4.000 personas. Y sin embargo, el Partido Popular se niega a quitar su nombre a un parque madrileño para mayor escarnio de las víctimas. 

Cuando los familiares de víctimas del franquismo vieron en sus televisores la imagen decrépita de Arias Navarro, pensaron que estaba cerca la hora de hacer justicia. Por fin podrían recuperar los restos de sus seres queridos, enterrados durante cuatro décadas en fosas comunes, para darles una sepultura digna. Creyeron que habían pasado los años de miedo y silencio, y por fin podrían rendirles público homenaje, para que recibieran el reconocimiento político y social que merecían por dar su vida en defensa de la democracia. Pero no fue así. Es verdad que Franco había muerto, pero no el franquismo. 

Lo que llegó fue la transición, que olvidó a las víctimas porque había ruido de sable en los cuarteles. Así lo puso de manifiesto el 23 F, con el asalto de Tejero al Congreso y los tanques de Milans del Boch, en las calles de Valencia. La intentona golpista de 1981 puso fin a los primeros intentos de abrir las fosas de Franco. Los familiares de las víctimas se resignaron y comprendieron que tenían que seguir esperando. Que todo estaba atado y bien atado.

Actualmente no hay peligro de involución, la democracia está consolidada y, sin embargo, todavía tenemos más de 100.000 desaparecidos en fosas comunes y cunetas. Mientras tanto, los restos del dictador descansan, con todos los honores, en el Valle de los Caídos. Un agravio insoportable, pero no el único. Demasiadas calles y plazas mantienen aún nombres que recuerdan la dictadura y algunos ayuntamientos se resisten a retirar los títulos honoríficos al dictador. En 16 iglesias se hace apología del fascismo con misas en memoria del dictador y la ultraderecha exhibe impunemente la simbología franquista. Pero tampoco pasa nada, porque el gobierno del Partido Popular, que tanto invoca la legalidad cuando le interesa, es el primero en incumplir la Ley de Memoria Histórica.

El Tribunal Supremo ha impedido que el juez Baltasar Garzón investigue los crímenes del franquismo y, ahora, el gobierno del Partido Popular se niega a extraditar a varios ex ministros de la dictadura, que son reclamados por la jueza argentina María Servini”. Una derecha nostálgica que se niega a condenar el franquismo y llama “régimen autoritario” a la dictadura de Franco.

Pero aquí no acaba la larga lista de agravios. El gobierno invita a las víctimas del terrorismo a hablar en la ONU y olvida invitar a las víctimas del terror franquista. Es más, utiliza a la ONU cuando le interesa e ignora al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas cuando le recuerda que los crímenes del franquismo no son amnistiables y tienen que ser investigados como delitos contra la humanidad.

Las víctimas fueron silenciadas por el franquismo y olvidadas por la transición, que no fue modélica como pretenden algunos, pues dejó mucho que desear. La sociedad civil ha tenido que organizarse en los últimos años, logrando algunos éxitos en la recuperación de la memoria democrática, ante la pasividad de jueces y gobiernos. Salvo el paréntesis del gobierno Zapatero, que resultó insuficiente. Hemos abierto, entre otras, la mayor fosa de Franco -ubicada en el cementerio de Málaga –, hemos quitado algunos símbolos fascistas y hemos señalizado lugares de memoria histórica, como las tapias del cementerio de Granada. Pero falta mucho por hacer, y esperamos hacerlo en Andalucía con la nueva Ley de Memoria Democrática.

Cuarenta años después de la muerte de Franco, nos hemos cansado de esperar. El próximo domingo, el movimiento memorialista marchará hacia el Congreso de los Diputados para decir BASTA YA a la impunidad de los crímenes del franquismo. Manifestaremos nuestro apoyo a la investigación de la jueza María Servini y exigiremos la creación de una Comisión de la Verdad.

(*) Paco Viguera es Portavoz de la Asociación Granadina Verdad, Justicia y Reparación

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+ info:

Han pasado 40 noviembres desde que una lápida de 5 toneladas de granito serrano sepultó al dictador. La recuperación de la democracia perdida en 1936, la modernización y democratización del país avanzaron en España aparcando o suspendiendo la reparación de las víctimas de la dictadura. Desde hace poco más de una década comenzó a hablarse de memoria histórica. Dos palabras con múltiples términos que componen un asignatura pendiente para la modernización de España.

Diego Barcala / ElDiario.es/ 20/11/2015

http://desmemoria.eldiario.es/diccionario-memoria-historica/

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El dictador filtró para sí parte de las donaciones “a la causa nacional” en plena guerra civil y revendió 600 toneladas de café donado por Brasil a España en 1939. El general golpista tenía en agosto de 1940 una fortuna cercana a los 400 millones de euros y el “holding empresarial” de El Pardo acumuló sueldos, comisiones, regalos y gratificaciones para amasar su riqueza.

Juan Miguel Baquero / ElDario.es / 20/11/2015

http://desmemoria.eldiario.es/fortuna-franco/

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Este mapa se realizó con la base de datos del Ministerio de Justicia con las fosas de la Guerra Civil española y la Represión franquista. La mayoría de los datos fueron proporcionados directamente por las labores realizadas por la Administración Central (Presidencia y Patrimonio Nacional), las administraciones autonómicas, como los Gobiernos de Aragón, Andalucía y Asturias, los ayuntamientos y distintas asociaciones privadas.

La base de datos lleva sin actualizarse desde 2011, año en que se paralizaron las actuaciones relacionadas con la ley de Memoria Histórica y se dejaron de repartir subvenciones para buscar y exhumar víctimas de las fosas.

En total, los datos del Ministerios cuentan con más de 120.000 víctimas exhumadas en 2.591 fosas que se encuentran repartidas a lo largo del territorio nacional. Andalucía, Aragón y Asturias son las comunidades con mayor número de fosas identificadas.

El mapa muestra la ubicación de las localidades donde se han encontrado fosas y el tamaño del círculo el número de víctimas exhumadas. El Valle de los Caídos es la fosa con mayor número de víctimas exhumadas, según los datos del Ministerio de Justicia. Al ser la diferencia con el resto tan elevada, hemos decidido ubicarlo fuera de la Península para que se puedan ver las demás fosas.

Raul Sánchez / Eldiario.es/ 20/11/2015

http://desmemoria.eldiario.es/mapa-fosas/

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Ellas no solo fueron fusiladas, encarceladas y torturadas durante la dictadura, también sufrieron una represión de género con el objetivo de imponer un modelo patriarcal y único de ser mujer. Muchas fueron humilladas por haber transgredido los límites de la feminidad tradicional durante la Segunda República.

Marta Borraz/ eldiario.es/20/11/2015

http://desmemoria.eldiario.es/represion-mujeres/

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Los consejos de administración de Endesa, La Caixa, Telefónica o Iberdrola fueron el cobijo en democracia de la mitad de los últimos ministros franquistas. La otra mitad recalaron en la política. También en la justicia hubo puerta giratoria: 10 de los 16 jueces del Tribunal de Orden Público franquista ascendieron al Tribunal Supremo o la Audiencia Nacional.

Diego Barcala / ElDiario.es/ 20/11/2015

http://desmemoria.eldiario.es/cargos-en-democracia/

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Ariel Dulitzky es relator de Naciones Unidas y visitó España en septiembre de 2013 junto al Grupo de Trabajo sobre las Desapariciones Forzadas o Involuntarias de la ONU. Es decir, el equipo de Naciones Unidas que ha examinado la Memoria Histórica, las fosas, la represión. Además, es uno de los autores del informe que evidencia que la falta de implicación del Estado y el Gobierno.

Raquel Perez/ Eldiario.es/20/11/2015

http://desmemoria.eldiario.es/entrevista-ONU-gobierno/

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A los 40 años de la muerte del dictador, la parafernalia simbólica del franquismo ocupa plazas, placas, calles y pueblos. Por ejemplo, un club de fútbol en Isla Mayor (Sevilla) que homenajea al dictador con su nombre. Pero también quedan pueblos, homenajes, fundaciones que homenajean al fundador o placas con el emblema de la falange en miles de portales de España.

Juan Miguel Baquero / eldiario.es/20/11/2015

http://desmemoria.eldiario.es/villafranco-futbol/

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¿Cuándo se proclamó la República? ¿Cuántos ejecutados siguen desaparecidos y cuántas fosas hay en España? ¿Quiénes fueron los presidentes republicanos? ¿Qué avances se produjeron en los derechos de las mujeres? ¿Qué suspensos pone la ONU a España?

Éstas, y otras preguntas, para poner a prueba conocimientos básicos sobre Memoria Histórica.

Juan Miguel Baquero/ Eldiario.es /20/11/2015

http://desmemoria.eldiario.es/test-conocimientos/

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Desde 2012, año en el que el Ministerio de Presidencia dejó de financiar las exhumaciones, las asociaciones las financian gracias a premios y donaciones humanitarias internacionales. Un sindicato noruego de electricistas aportó 6.000 euros en 2014 y la Fundación Abraham Lincoln de Nueva York entregó 100.000.

Diego Barcala/ eldiario.es/20/11/2015

http://desmemoria.eldiario.es/rajoy-olvida/

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+ info:

Cuarenta años sin resolver la herencia de Franco.

A estas alturas de la democracia, cuarenta años después de la muerte del dictador, se puede indicar el franquismo como origen de algunos problemas pero no debe servir como justificación. El país arrastra desde entonces graves carencias democráticas. 

Publico.es/ ALEJANDRO TORRÚS / MADRID.- 20/11/2015

Culpar a Franco sería demasiado fácil. La democracia española nació tras una dictadura de 36 años y tres de cruenta, y para muchos genocida, Guerra Civil. La restauración democrática en España afrontaba el reto, por tanto, de resolver los problemas heredados de un pasado dictatorial, de unas heridas abiertas hasta la médula y de unas instituciones envenenadas de franquismo. La Transición dejó de un lado gran parte de los problemas y perpetuó otros tantos sin el debate social necesario. Pero tampoco se puede culpar a la Transición. 

A estas alturas de la democracia, cuarenta años después de la muerte del dictador, se puede indicar el franquismo como origen de algunos problemas, pero no debe servir como justificación. Los sucesivos gobiernos de la democracia han evitado debates y han intentado mantener un velo sobre el pasado. Como si nunca hubiera existido o como si el país no arrastrara serias y graves deficiencias democráticas heredadas de una dictadura y una Guerra que para poder superar hay que enfrentar, analizar, resolver y digerir. 

EL Valle de los Caídos y los símbolos franquistas

Este 2015 se han cumplido 75 años del inicio de la faraónica obra en plena sierra de Madrid donde, desde hace 40 años, está enterrado el dictador Francisco Franco junto al fundador de Falange, José Antonio Primo de Rivera. El complejo monumental, construido gracias al trabajo esclavo de miles de republicanos, alberga más de 30.000 caídos, republicanos y franquistas, en la Guerra Civil y está considerada como la mayor fosa común de todo el Estado. 

En 37 años de democracia sólo una vez el Gobierno ha accedido a devolver los restos óseos de víctimas allí enterradas a las familias. Fue en 1980, cuando el Gobierno de la UCD autorizó la exhumación de 133 cadáveres. Todos ellos fueron enterrados en sus localidades de origen en Navarra. La pregunta es evidente: ¿Por qué UCD sí que permitió las exhumaciones y PP y PSOE no lo han permitido?

El complejo no ha cambiado un ápice desde que murió el dictador. Sigue nombrando a Franco como “anterior jefe del Estado” y no hay ni una placa que explique al visitante ni el significado del monumento, ni el horror que supuso su construcción para los republicanos esclavos. En noviembre de 2011 la Comisión de Expertos para el Futuro del Valle de los Caídos entregó las conclusiones del informe que le encargó el Gobierno de Zapatero. Rajoy ya había ganado las elecciones y el Gobierno en funciones dejó el informe en un cajón pidiendo al Partido Popular que no se olvidara de él. No se ha vuelto a saber más. 

Fosas, desaparecidos y acceso a la justicia de las víctimas

Según el auto del juez Garzón en España hay todavía, 76 años después del final de la Guerra Civil, 114.266 desaparecidos, de los que, en su inmensa mayoría, permanecen desde hace más de 70 años en las al menos 2.246 fosas comunes desperdigadas por todo el territorio. Decía Arturo Pérez-Reverte recientemente que sacar a los republicanos de las fosas comunes es “sentido común”. Un sentido común, al parecer, inexistente en este país.

Desde 1978 hasta el golpe de Estado fallido de Tejero en 1981 se exhumaron entre 1.000 y 2.000 cuerpos, pero tras el intento de golpe todo quedó paralizado hasta la década de los 2.000 cuando comenzó el trabajo de organizaciones como la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica. 

Los organismos de la ONU especializados en derechos humanos también han solicitado la derogación de la Ley de Amnistía que ha impedido a las víctimas el acceso a la justicia de las víctimas

Tanto el Comité de Derechos Humanos de la ONU como el Comité de la ONU contra la Desaparición Forzada y el relator especial de Naciones Unidas para la promoción de la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición han señalado al Estado español su obligación de investigar estas desapariciones, exhumar a las víctimas y poner punto y final a la impunidad de la dictadura y de los crímenes del bando franquista durante la Guerra Civil.

En este sentido, los organismos de la ONU especializados en derechos humanos también han solicitado la derogación de la Ley de Amnistía que ha impedido a las víctimas el acceso a la justicia y han mostrado, reiteradamente, su “preocupación” por la posición de la Fiscalía de la Audiencia Nacional al denegar la solicitud de extradición a Argentina de, entre otros, dos torturadores franquistas González Pacheco, Billy el Niño, y Jesús Muñecas Aguilar

Privilegios de la Iglesia católica 

La Iglesia católica fue un pilar de la dictadura de Franco y jugó un papel fundamental durante la Guerra Civil mostrando su apoyo a los militares golpistas frente al legítimo Gobierno de la República. Salvo escasas, muy escasas, excepciones de los dirigentes de la Iglesia salieron pocas críticas sobre las violaciones de derechos humanos de los golpistas y a la falta de libertad de la dictadura. De hecho, la gran excepción en este sentido fueron los curas obreros del tardofranquismo. 

El profesor de la Universidad Carlos III Rafael Escudero explica en la ponencia Con la Iglesia hemos topado cómo, durante la Transición, los jerarcas de la Iglesia pugnaban por asegurarse un buen puesto de salida una vez volviera la democracia: “Así lo hicieron; primero, evitando que durante la Transición se planteara abiertamente la cuestión de la relación Iglesia y Estado; segundo, impidiendo que el texto de 1978 recogiera la fórmula del Estado laico que había proclamado la República; y tercero, mediante la ratificación de los Acuerdos con la Santa Sede de 1979, que permitieron mantener sus privilegios de cara al futuro”.

La presencia del catolicismo se manifiesta con fuerza en la educación, donde se mantiene la enseñanza de la religión

La Constitución española de 1978 consagra el principio de aconfesionalidad del Estado, sin embargo en el artículo 16.3 se afirma que “los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones”. 

En opinión de Escudero, esta frase recogida en la Constitución es “la que impide avanzar hacia un Estado laico, a la vez que garantiza una relación preferente de la Iglesia católica con los poderes públicos frente a otras confesiones y credos religiosos”. De hecho, es a este artículo al que la Iglesia alude para defender sus privilegios y su privilegiada financiación a costa del Estado. 

La presencia del catolicismo se manifiesta con fuerza en la eduación, donde se mantiene la enseñanza de la religión, pero es visible es muchos otros ámbitos, como la omnimpresencia de símbolos católicos en actos oficiales, tomas de posesión de cargos y desfiles militares, así como la de crucifijos en colegios públicos (a pesar de las sentencias que exigen su retirada).  También cabe recordar que la influencia del pensamiento católico es el que está detrás de los intentos del exministro de Justicia Alberto Ruiz-Gallardón de reformar la ley del aborto y de separar el derecho a decidir sobre la maternidad de la propia madre. 

Monarquía

La persona de Juan Carlos I es el vínculo más claro y evidente entre la democracia española y la dictadura que le precedió. Franco designó a Juan Carlos de Borbón como su sucesor y la Constitución española de 1978 lo consagró como el jefe de Estado de la nueva España democrática. Sin embargo, no fue una elección libre. Los españoles se limitaron a votar sí o no a la Constitución y en ningún momento hubo un debate abierto sobre la forma del Estado. 

Los partidos políticos aceptaron antes de las elecciones constituyentes que la forma del Estado sería la monarquía

El periodista Carlos Elordi señala en la obra ¿Quiénes mandan de verdad en España? que Juan Carlos conservó su corona porque los partidos políticos que obtuvieron representación en las elecciones constituyentes de 1977 “habían aceptado antes de que estas se celebraran que la monarquía sería la forma del Estado en democracia y que Juan Carlos de Borbón sería el jefe de ese Estado”. “Incluidos los comunistas, y muy a su pesar, porque esa aceptación implicaba reconocer que su lucha durante cuarenta años había fracasado“, prosigue. 

No es baladí tampoco que los partidos abiertamente republicanos y que habían sido la columna de la II República, como la Izquierda Republicana de Azaña, no habían sido legalizados en ese momento. La abdicación de Juan Carlos I volvió a abrir con fuerza el debate sobre la forma del Estado en la izquierda del país, pero, hasta la fecha, no hay una opción real de que los grandes partidos permitan a la ciudadanía expresar su opinión al respecto y definir con total libertad quién ocupa la jefatura del Estado.  

Ausencia de símbolos compartidos

La dictadura enarboló la bandera de España y se apoderó de ella, excluyendo a la izquierda de la identificación de este símbolo nacional. Después, en democracia, fue la derecha la que sacó a pasear esa misma bandera rojigualda desprovista del aguilucho, eso sí. Lo mismo ha sucedido con el himno, que se ha mantenido igual con la diferencia de que se le quitó la letra escrita por Jose María Pemán. 

El hecho de que la bandera, el himno y los símbolos del Estado sean identificados con una derecha que no ha roto del todo con el pasado dictatorial dificulta, y mucho, que todos los españoles se sientan cómodos con los símbolos del Estado español. Tan solo en acontecimientos de enorme interés, y alejados de la política, como en los éxitos deportivos de las selecciones de fútbol y baloncesto la bandera de España no ha estado asociada a la derecha. 

La ausencia de símbolos compartidos es una muestra más de la ausencia de un proyecto político común como país y de la ausencia de una memoria colectiva sobre lo que fue la dictadura y la Transición. Construir un proyecto de país en el que todos se sientan cómodos y representados en los símbolos del Estado que les da nacionalidad es una obligación para el futuro gobierno. 

Una historia falseada o silenciada y los archivos cerrados

Los mitos sobre la figura de Franco, los silencios sobre la represión de la dictadura y de la Guerra Civil, los intentos de presentar a la República como culpable de la Guerra Civil y de presentar la dictadura como un remanso de paz permanecen aún pasados 40 años de la muerte del dictador. Prueba de ello fue el intento de la Real Academia de Historia de perpetuar un diccionario biográfico plagado de mitos y leyendas franquistas construidos durante los años posteriores a la Guerra Civil por los golpistas y rejuvenecidos por parte de la derecha española durante la democracia.

La obra parecía una burla de proporciones históricas. No definía a Franco como un dictador y sí como un “valeroso militar” y el franquismo fue calificado de “autoritario, pero no totalitario”.

La obra parecía una burla de proporciones históricas. No definía a Franco como un dictador y sí como un “valeroso militar” y el franquismo fue calificado de “autoritario, pero no totalitario”. La Guerra Civil fue sustituida a menudo por otros términos como “cruzada” o “guerra de liberación”. Un auténtico chiste. Pero el revisionismo fue aun más lejos. A la salvaje represión ocurrida en Badajoz tras ser conquistada por los franquistas se la denominó “normalizar la vida ciudadana”. En definitiva, todo un panfleto digno de ser firmado por el mismísimo Fraga durante sus años como ministro de Información.

Un ejemplo más de los intentos de la derecha por criminalizar a la República de los desmanes y excesos de los golpistas se vio con el diputado del Partido Popular Rafael Hernando, que señaló en un programa de televisión que “las consecuencias de la Segunda República llevaron a un millón de muertos. El argumento no era nuevo. Esperanza Aguirre y Manuel Fraga, entre otros, ya lo habían utilizado. “La II República fue un auténtico desastre para España y los españoles”, escribió Aguirre en un artículo publicado en ABC. Fraga fue aún más lejos y en una entrevista concedida a El País en el año 2007 señaló: “Pero los muertos amontonados son de una guerra civil en la que toda responsabilidad, toda, fue de los políticos de la II República. ¡Toda!”, dijo.

No ayuda en absoluto a establecer la verdad sobre lo que ha ocurrido en España desde 1936 a 1939 la destrucción o desaparición de documentos históricos, que tan bien explica el historiador Francisco Espinosa en un artículo que publica hoy este diario, ni que los archivos estén cerrados. Cuarenta años después de la muerte del dictador se sigue sin saber con exactitud qué documentación existe en relación al golpe militar, la represión franquista y la dictadura. 

Una derecha que no ha roto con el franquismo

Los vínculos del Partido Popular y el franquismo son más que evidentes. No hay más que remontarse a su fundador: Manuel Fraga. Sin embargo, en estos años de democracia, en los que el Partido Popular ha sido el partido del Gobierno durante 12 años, los conservadores han rechazado romper vínculos con el franquismo. Sólo una vez, el 20 de noviembre de 2012, el Partido Popular optó por condenar la dictadura de Franco. Lo hizo a través de una resolución pactada con todas las fuerzas parlamentarios y en el seno de la Comisión Constitucional. Desde entonces, los conservadores han vuelto a entonar el ‘NO’ en la inmensa mayoría de resoluciones relativas a la condena de la dictadura y el derecho de las víctimas de acceder a la justicia. 

El Sáhara ocupado por Marruecos

El 14 de noviembre de 1975 España violó la legalidad internacional y entregó el Sáhara Occidental a Marruecos y a Mauritania faltando a su propia palabra. España se había comprometido a descolonizar y a realizar un referéndum de autodeterminación en el territorio y, por contra, ejecutó una entrega del mismo a los mencionados países. En aquel momento Franco estaba moribundo en la cama y el temor a un conflicto bélico, entre otros motivos, llevaron a una decisión ilegal desde el derecho internacional. 

Cuarenta años después de aquello la situación de los saharauis sigue sin ser resuelta y España sigue sin implicarse como debiera en la resolución del conflicto

Cuarenta años después de aquello la situación de los saharauis sigue sin ser resuelta y España sigue sin implicarse como debiera en la resolución del conflicto ya que a efectos de derecho internacional España sigue siendo la potencia colonial administradora del Sáhara Occidental. En 2015, 24 años después del alto al fuego entre el Frente Polisario y Marruecos y de la promesa de realizar unreferéndum de autodeterminación, la mitad de la población saharaui vive en condiciones infrahumanas en los campamentos de refugiados de Argelina y la otra mitad bajo ocupación marroquí en el Sáhara Occidental.

La oligarquía y los impuestos

La Transición también permitió, como señala la doctora en Historia Contemporánea y profesora titular de la Carlos III Matilde Eiroa que los apellidos franquistas se instalaran en el poder heredando cargos y posiciones privilegiadas a lo largo de los años de democracia. Un buen ejemplo son las familias Aznar, Arias-Salgado, Calvo Sotelo, Cabanillas, Rato… 
La doctora también señala la doctora que nos queda como herencia “la existencia de una élite que le cuesta cumplir con la ley porque siempre ha tenido privilegios y no ha satisfecho las obligaciones como ciudadanos, por ejemplo el pago de impuestos”. 

http://www.publico.es/politica/cuarenta-anos-resolver-herencia-franco.html

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+ info:

BALTASAR GARZÓN PIDE AL CONSEJO DE MINISTROS QUE EL ESTADO PIDA PERDÓN A LAS VÍCTIMAS DEL FRANQUISMO Y SUS FAMILIARES

El exjuez de la Audiencia Nacional y otros dos letrados proponen la reconversión del Valle de los Caídos en un Centro de Memoria

También piden que se realice un acto en las Cortes Generales para que “la autoridad competente del Estado” pida perdón a las víctimas del franquismo y sus familiares

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infoLibre | 19-11-2015

El exmagistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón y otros dos abogados han presentado un escrito ante el Registro del Consejo de Ministros en el que piden la reconversión del Valle de los Caídos en un Centro de Memoria de las Víctimas, la exhumación de los cuerpos de Francisco Franco y José Antonio Primo de Rivera y un acto parlamentario de perdón a las víctimas del franquismo y sus familiares.

Garzón, Manuel Ollé y Eduardo Ranz han recurrido al Derecho fundamental de Petición, contemplado en la Constitución, para pedir al Gobierno la reconversión del Valle de los Caídos en un espacio de memoria, eliminando del lugar toda la simbología franquista y actos conmemorativos que se celebran allí.

Coincidiendo con el 40 aniversario de la muerte de Franco, el escrito pide al Gobierno que ordene la salida de los cuerpos de Franco y Primero de Rivera del Valle de los Caídos para trasladarlos al lugar que decidan las familias.

También piden que se realice un acto en las Cortes Generales para que “la autoridad competente del Estado” pida perdón a las víctimas del franquismo y sus familiares, “como manifestación del pleno reconocimiento y reparación moral”.

Garzón y los dos abogados comienzan pidiendo la anulación y derogación de las normas de creación de la Basílica y de La Fundación de la Santa Cruz del Valle de los Caídos, que datan de 1940 y 1957, y que consideran que “contradicen” la Constitución y la ley de Memoria Histórica.

También reclaman la eliminación de toda simbología franquista del Valle de los Caídos: dos escudos preconstitucionales con el águila imperial, un escudo de Francisco Franco sobre la puerta de acceso a la Sacristía, inscripción en letras de bronce ‘Caídos por Dios y por España, 1936-1939, RIP’ o un mosaico que representa a un Cristo sedente al que se dirigen cuatro procesiones de mártires, dos de las cuales portan respectivamente los estandartes de Falange y de requetés.

Además, abogan por un nuevo marco jurídico relativo a la Fundación de la Santa Cruz del Valle de los Caídos, sus bienes y situaciones jurídicas; además de la creación de un lugar de identificación, dignificación y homenaje de quienes se encuentran inhumados y la publicación oficial del nombre de todas las víctimas.

http://www.infolibre.es/noticias/politica/2015/11/19/baltasar_garzon_pid…

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RECLAMAN DE NUEVO LA RETIRADA DEL VALLE DE LOS CAÍDOS DE LA TUMBA DE FRANCO 40 AÑOS DESPUÉS DE SU MUERTE

► Colectivos de la Memoria Histórica convocan una concentración el sábado frente al Valle de Cuelgamuros para reivindicar que se retiren los restos del dictador y todos los “símbolos fascistas”

► El PP lo rechazó hace un año votando en el Congreso en contra de una iniciativa del PSOE y de la Izquierda Plural, a quienes acusó de traer propuestas que “rezuman odio”

►El Gobierno justificó una inversión 286.000 euros para reparar desperfectos del monumento pero se negó a convertirlo en un centro de la Memoria Histórica para “no reabrir heridas innecesarias”

eldiario.es | Carmen Moraga | 18-11-2015

Este viernes, 20 de noviembre, se cumplen 40 años de la muerte del dictador Francisco Franco y sus restos mortales siguen enterrados en el Valle de los Caídos pese a las reiteradas protestas de colectivos, partidos políticos y asociaciones que piden que el lugar se convierta en un recinto “de paz y concordia”. Este año no será menos: distintos colectivos que luchan por la Memoria Histórica y los derechos humanos volverán a reclamar que se eliminen del Valle de los Caídos la tumba del dictador y todos los símbolos fascistas que hay en el recinto. 

Como en otras ocasiones, la concentración de este año -la novena- ha sido organizada por La Comuna y el Foro Social de la Sierra de Guadarrama pero cuenta también con el apoyo de otros colectivos, como el Foro por la Memoria. La protesta ha sido autorizada por la delegación del Gobierno y tendrá lugar entre las 12 horas y la una del mediodía del sábado, 21 de noviembre, frente al Valle de Cuelgamuros, en el municipio de San Lorenzo de El Escorial, en donde proclamarán los lemas “Fuera la tumba del dictador”, “Fuera fascistas de nuestra sierra”.

Estos colectivos exigen, asimismo, el desmontaje de la gran cruz que preside el monumento, en donde, además de Franco, está enterrado José Antonio Primo de Rivera, fundador de Falange, y quieren que el lugar se convierta en un centro para la Memoria Histórica, “un memorial antifascista”. “Es inconcebible que 40 años después Franco siga enterrado en un monumento del Patrimonio Nacional”, lamenta Adolfo Rodríguez, miembro del Foro Social.

“Combatimos contra el franquismo en su última etapa; nuestra lucha pasada es una parte de la memoria silenciada, nuestra lucha actual: recuperar esa historia colectiva y acabar con la impunidad del franquismo; contra la represión de ayer y de hoy”, afirman en el cartel de convocatoria.

“Exigimos un año más que el Valle de Cuelgamuros se convierta en un Memorial, al estilo de los que se han hecho en los campos de concentración nazi, en el que se pongan de manifiesto los crímenes de la dictadura y que se rinda justo homenaje a sus víctimas y a quienes lucharon contra el fascismo, un recinto donde no puede haber lugar para la tumba del dictador ni su cruz, que solo sirven para simbolizar las atrocidades que se cometieron en su nombre”, añaden en el comunicado.

Estas concentraciones se han venido repitiendo a lo largo de los últimos años en los aniversarios de la muerte de Franco. Pese a la aprobación de la ley de Memoria Histórica, promovida por el Gobierno del socialista Rodríguez Zapatero, sus reclamaciones han quedado sin atender. Con la llegada al poder del PP, en 2011, la situación se ha agravado y las peticiones e iniciativas parlamentarias encaminadas a reparar esta situación han chocado contra el muro de la mayoría absoluta conservadora.

En noviembre de 2014 la Comisión de Cultura del Congreso debatió una proposición no de ley del PSOE y de la Izquierda Plural en la que se pedía que todo el recinto dejara ser un “símbolo de agravio y exclusión de buena parte de la ciudadanía” para convertirlo en un lugar de “paz”. El diputado Odón Elorza defendió la propuesta argumentando, entre otras cosas, que después de tantos años el lugar no podía ser “contrario a la cultura de la convivencia y de la paz, a la concordia cívica, a la reconciliación de la ciudadanía española y a la rehabilitación de la memoria colectiva democrática de las víctimas de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura franquista”.

Pero el PP la rechazó alegando que el lugar “es una iglesia y un cementerio” y ya no tiene “ninguna significación política”. La portavoz popular, Rocío López, no se quedó ahí sino que acusó a los socialistas y a los diputados de IU de plantear iniciativas que “rezuman odio”. A los dos grupos les pidió que dejaran “descansar a los muertos”.

Un año antes, en agosto de 2013, en una respuesta escrita al diputado del PSOE, Ramón Jáuregui, el Gobierno del PP justificaba la inversión de 286.000 euros destinada a reparar el monumento argumentado que su fin era “asegurar el estado de las instalaciones”. El Ejecutivo de Mariano Rajoy reiteró que “no había que abrir heridas innecesarias” por lo que el monumento sigue igual que hace 40 años, los mismos que duró la dictadura.

http://www.eldiario.es/politica/Valle_de_los_Caidos-Memoria_Historica-co…