Alcalá la Real (Jaén). Petición para que se cumpla la ley de memoria histórica Un colectivo reclama al Ayuntamiento cambiar los nombres de cuatro calles

Petición para que se cumpla la ley de memoria histórica

Un colectivo reclama al Ayuntamiento cambiar los nombres de cuatro calles

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Alcalá la Real, en la línea de lo anunciado hace unos meses, envía un escrito al Ayuntamiento para instarlo a que, en cumplimiento del legislación vigente, se cambie el nombre de cuatro calles. Se trata de Alférez Sánchez-Cañete, Alférez Torres, Alférez Carrillo y Alférez Utrilla. El colectivo alcalaíno considera que en estos casos existe vinculación con el concepto de exaltación del artículo 15 de la Ley 52/2007. La propuesta del texto manifiesta: “Dada la clara vinculación de las calles mencionadas con la dictadura franquista y con el intento, en el momento de obtener su actual nomenclatura en 1961, de exaltar un golpe militar que condujo a una Guerra Civil y a un periodo de casi cuarenta años con ausencia de libertades, se propone la modificación de las mismas en cumplimiento de la ley vigente, sustituyéndolas por otras denominaciones que honren a valores o personalidades locales que sean ejemplo de la democracia y de la sociedad incluyente en la que vivimos. Por dicho motivo, se sugiere que las nuevas denominaciones posibles se sometan a votación popular”.

Las cuatro vías urbanas llevan el nombre de jóvenes combatientes del bando nacional que perdieron la vida en acciones bélicas. Rafael Sánchez-Cañete Alonso de León, que murió, el 6 de agosto de 1938, en una de las ofensivas contra la Cabeza del Molino, un monte situado cerca de la aldea de Ribera Baja. Adolfo Carrillo Pulido pereció en Benicarló (Castellón); Manuel Torres Sánchez, en la Sierra de Espadán, en la misma provincia, y Fernando Utrilla Sán- chez-Cañete, en Majadahonda, en la actual comunidad de Madrid.

Desde la asociación se destaca que los alféreces fueron “un instrumento explotado por la dictadura por su lealtad potencial a la figura de Franco, de modo que no parece desacertado el calificativo de Tusell de ‘dictadura militar’ por la omnipresencia del Ejército en el sistema político de entonces”. Añade que la importancia de estos militares en el triunfo y la consolidación del régimen franquista es indudable, tal y como recogió en su libro de 1955 “Alféreces Provisionales”, Eduardo Crespo Gálvez. En 1958, prosigue el requerimiento, se creó la Hermandad Nacional de Alféreces Provisionales, la cual exhibía entre sus valores que defender los principios del 18 de julio. “Es en ese contexto en el que se pondrá el nombre de varios alféreces fallecidos “por la Gloriosa Cruzada” en el llamado Barrio de Belén-Tinta, decisión adoptada por la comisión permanente del Ayuntamiento el 18 de enero de 1961”, detalle el escrito.

La entidad asegura que más de 45 años después de la muerte del dictador en Alcalá persisten calles, que exaltan a personalidades locales adeptas a la sublevación y a individuos destacados del régimen, así como escudos y placas.