Ángel Viñas: «Franco se hizo millonario cuando sus hombres morían en las trincheras»

Historiador, diplomático y economista, Ángel Viñas ha escrito ampliamente sobre la República, la Guerra Civil o el franquismo. Ahora desmonta el mito del Franco austero

DEIA | Raquel Ugarriza | Bilbao | 24-9-2015

A pocas semanas de que se cumplan cuarenta años de la muerte del dictador, Ángel Viñas (Madrid, 1941) publica La otra cara del caudillo. Mitos y realidades en la biografía de Franco (Crítica).

Dice de Franco que se enriqueció con métodos no aclarados.

-Las cosas no fueron como nos han contado. Franco entra en la guerra sin un duro y termina la contienda con una fortunita de 34 millones de pesetas, que según los cálculos del profesor José Ángel Sánchez Asiaín equivaldrían hoy a 388 millones de euros. No soy el primero en decirlo, me puso en la pista el periodista de la revista Tiempo Javier Otero. He seguido en el surco que él abrió y he tenido la paciencia de ver lo que había detrás.

Que es…

-Que Franco se enriqueció, se hizo millonario y que no fue por canales éticos ni morales o confesables. Uno de los métodos fue el desvío de donativos y de suscripciones populares a sus cuentas personales. Que yo haya podido colegir, empezó el 23 de octubre de 1936, solo a las tres semanas de que se le exaltara como jefe del Estado. No era un hombre que perdiera mucho el tiempo. En plena guerra, dice: empiecen a cubrirme el riñón.

¿Qué es lo que usted denomina la ‘Operación Café’?

-Eso fue para redondear. ¡Como no había acumulado lo suficiente…! Fue en 1939, había acabado la guerra, era la posguerra de la represión. Se aprovecha del donativo del dictador brasileño Getúlio Vargas de 600 toneladas de granos de café. Se lo vendió a la Comisaría de Abastecimientos y Transportes (CAT) para que lo distribuyera según el precio público marcado. La CAT traspasó en 1940 a las cuentas bancarias de Franco 7,5 millones de pesetas, el equivalente a 85 millones de euros de 2010. Como se comprenderá, 600 toneladas de café difícilmente iban a ser donadas para que las consumiera Franco. Hubiera necesitado varias vidas para bebérselo. Tuvo que ser una donación de jefe de Estado a jefe se Estado pero, obviamente, para el pueblo español.

¿Si ha logrado documentar varias transacciones de este tipo, cuánto no habrá por descubrir durante los cuarenta años de dictadura?

-Ese es otro tema que creo que será muy difícil de documentar. Mi objetivo ha sido clarificar el origen de la fortuna porque, una vez que Franco está asentado en el poder, que su voluntad es ley, que está por encima del bien y del mal, que sea depredador es casi normal. El origen de su fortuna es lo determinante, cómo se hace millonario en guerra. Es lo chocante, que Franco se haga millonario cuando sus soldados, y también los del otro bando, están muriendo en las trincheras. Es de una inmoralidad terrible.

¿Cuáles son los otros mitos sobre Franco más instalados en el imaginario español?

-Hay dos ideas fundamentales. La primera es que la República fue un desastre y que la Guerra Civil, aun siendo muy lamentable de alguna manera, si no inevitable, estaba justificada. No es que lo diga yo, lo dijo en un artículo infame en el ABC una persona tan relevante como Esperanza Aguirre, un peso pesado en el PP. El segundo mito es que, aunque la guerra fue un desastre, al final y al cabo Franco aseguró la paz, el orden y el milagro económico español. Esto lo defiende Jaime Mayor Oreja. Son ideas que para mucha gente son válidas. En definitiva, la sociedad española no ha ajustado cuentas con el pasado colectivo.

¿Por qué?

-Porque la dicotomía de los dos bandos, los rojos y los fascistas, permanece en el recuerdo social. La labor del historiador es mostrar cuáles son las parcelas significativas del pasado y yo me he dedicado a derrumbar mitos de los vencedores.

Recuerda usted que Mariano Rajoy se ha referido a la dictadura de Franco como régimen autoritario. ¿El PP ha ajustado cuentas con el pasado colectivo?

-No veo que el PP se haya distanciado políticamente de la dictadura franquista. En realidad, ni la considera dictadura. No ha habido una condena explícita, un pronunciamiento sobre el franquismo, es como si no existiera para el PP. Todo lo contrario, en todo caso hay pronunciamientos como los del portavoz en el Congreso, Rafael Hernando, que ha dicho brutalidades históricas. El PP, además, ha paralizado la desclasificación de documentos militares que había dejado ya encarrilada el PSOE y ha frenado la aplicación de la Ley de Memoria Histórica dejándola sin fondos. Todo ello es una involución en el proceso de desentrañamiento del pasado. Si el pasado del franquismo es tan amable, digno y glorioso como dicen que fue, no habrá nada que ocultar, ¿no? Pero ellos saben que no es así.

Arremete contra la biografía de Franco publicada el año pasado por Stanley G. Payne y Jesús Palacios, en la que niegan que el dictador fuera fascista o en la que dicen que la corrupción entonces no era nada comparable con la que ha vivido España en los últimos años.

-Expongo documentos que demuestran lo contrario. A diferencia de Payne me mancho con la mugre de los papeles de los archivos. Franco era un militar fascistizado proclive a lo nazi. Absorbe una serie de principios de la cosmología nazi, en particular el Führerprinzip, es decir, que la voluntad de Franco era la fuente del Derecho, y que aplica a rajatabla desde 1937. Además, demuestra su querencia por el Tercer Reich, no por los aliados. Y, en cuanto a la corrupción, lógicamente en un régimen en el que no había libertad de expresión, de asociación, de partidos políticos, ni separación de los poderes del Estado, que alguien me diga cómo van a salir a la superficie las corruptelas.