Nace en El Saucejo (Sevilla) el 4 de octubre de 1932. Su padre, Cristóbal Hormigo, era jornalero, y durante la Exposición de 1929 pasó a ser jefe de la Policía Municipal. Tras el alzamiento es encarcelado, librándose de la pena de muerte por haber evitado la quema de una iglesia. Posteriormente lo mandan a un campo de concentración en San José de la Rinconada. En los dos años que el padre pasa encarcelado, la familia de José sobrevive gracias a los trabajos de costura que la madre realiza en la calle.
Cuando su padre es liberado, van a Osuna a trabajar en las viñas y ya en el año cuarenta vuelven a Sevilla. Su padre y su hermano empiezan a trabajar en una cuadrilla mixta de libertos y presos en el Canal del Bajo Guadalquivir. José entrará más tarde a trabajar como arriero, sirviendo así de enlace entre los presos y el Partido Comunista en la clandestinidad. Posteriormente, en la empresa de transportes Los Amarillos, comienza su lucha sindical en un cédula comunista. En 1963 detienen a un compañero del Partido Comunista, una noche que tiraban octavillas, y éste, tras pasar terribles torturas en la comisaría, confiesa los nombres de los demás miembros de su cédula. José fue detenido junto con 8 compañeros más. En el consejo de guerra lo condenan a 4 años, 2 meses y 15 días.
Después de la cárcel lo arrestaban continuamente por cualquier motivo. A pesar de esto siguió luchando desde el partido por acabar con la dictadura franquista.
Y hasta el día de hoy, José Hormigo sigue luchando por la recuperación de la Memoria Histórica y ha escrito todas sus vivencias.