José Manuel Sesto González era natural de Trebujena (Cádiz), de 42 años de edad, estaba casado y tenía seis hijos. Llega a Dos Hermanas (Sevilla) en 1920, donde se establece con su esposa y nace su primer hijo. Vive en la calle Conde Ybarra, Reposo, Barrio San José y Vereda del Garaje, su último domicilio.
Obrero agrícola, militante del Sindicato Único de Oficios Varios de CNT. De 1920 a 1922 se forma a través del sindicato de la escasa legislación social que había en la época, y pasa a formar parte de los cuadros dirigentes de la organización. Militante activista, participa como miembro de los comités de huelgas y piquetes.
En julio de 1931 la CNT convoca una huelga general en todo el país reivindicando la jornada laboral de 8 horas, en Dos Hermanas con el apoyo de UGT y todos los partidos de izquierdas es seguida mayoritariamente por los trabajadores. Después de un mitin en la Plaza del Arenal, donde los lideres políticos dirigen la palabra a los concentrados, los manifestantes se dirigen a sacar de la empresa Sevillana de Electricidad a unos esquiroles que no han secundado la huelga, y al llegar la manifestación a la altura de la calle San Luis, un teniente de la Guardia Civil de apellido Leyva, pistola en mano intenta disolver a los manifestante disparando en principio al aire, lo que produce un intercambio de disparos entre los manifestantes y el teniente. Como producto de esta actuación hay 15 heridos, algunos graves, muriendo un manifestante al otro día en el Hospital de Sevilla: Manuel Alcoba Andrada, militante de CNT. Al día siguiente es detenido José Manuel Sesto González junto a Fabián Cala Rodríguez, Antonio Gordillo Maldonado, Manuel Arias Díaz, Manuel Mata Serrano, todos de la CNT, junto a Francisco Díaz de la Haza del Partido Comunista; acusados de formar piquetes y pistola en mano llevar a los trabajadores a la huelga, son trasladados al Penal del Puerto de Santa María, donde conocen a Buenaventura Durruti que también estaba detenido casi por los mismos cargos que ellos. Quince días después son puestos en libertad.
Estos hechos de 1931, son confirmados por Fabián Cala Rodríguez en los años 70 poco antes de su muerte, al biógrafo José Sánchez Gutiérrez, indicando también que él sobrevive a la purga de 1936, porque se va del pueblo en los días siguientes del golpe militar del 18 de Julio.
Tras los disturbios el día 20 de Julio de 1936, entre el Escuadrón de Caballería al mando del Capitán Ramos de Sala, y militantes de partidos y sindicatos en los Cuatro Cantillos y en la actual calle Santa María Magdalena, en los que mueren varios miembros de las Juventudes Socialistas Unificadas y del Partido Comunista, se marcha andando hasta la Isla Menor, zona bien conocida por él, donde está escondido durante 3 ó 4 días. Temiendo que tomaran represalias contra su familia regresa a Dos Hermanas, siendo detenido en su casa en presencia de su mujer e hijos al día siguiente. En el momento de la detención, cuando hace ademán para de coger la chaqueta, le dicen que no hace falta, que lo llevan sólo para hacerle unas preguntas y que estará de vuelta antes de que anochezca.
Permanece detenido en el calabozo municipal durante 4 o 5 días, donde su mujer le lleva el almuerzo hasta que le dicen que ya no esta allí y que no va a necesitar más comida. Es trasladado desde el Ayuntamiento a la sede de la Falange, que estaba en la actual calle Manuel de Falla, donde es interrogado y torturado como hacían con la mayoría de dirigentes políticos y sindicales.
Su esposa Rosario González Fuente, siempre afirmó que durante los días que estuvo detenido en el calabozo municipal, había también una mujer de nombre Matilde y los hermanos Fornet. Según se recoge en el informe realizado por una comisión que en el año 1976 elabora un censo de los vecinos asesinados en Dos Hermanas durante los años 1936-1939 por las fuerzas franquistas, el día 1 de Agosto de 1936 en la Cuesta de Barranco son asesinados: Matilde Fernández Álvarez, Manuel Fornet Díaz, Francisco Fornet Díaz, Manuel Henares Avilés, Juan Henares Avilés, Rafael Henares Avilés y Antonio Gómez Sánchez, todos militantes de la CNT. Por lo que cabe deducir que José Manuel Sesto González, fue también asesinado junto a este grupo de compañeros.
Aún hoy, sus restos siguen desaparecidos. Es de suponer que se encuentren en la fosa común que se habilitó para ello en el cementerio municipal de Dos Hermanas.
Estos datos han sido tomados de los testimonios de su familia, dando veracidad a los mismos hasta que investigaciones posteriores demuestren lo contrario.