Memoria Histórica
Se esperó casi 40 años a que la dictadura franquista desapareciese y nos hiciéramos con la democracia. Transcurren otros 40 años para que la democracia se despertara para devolver la dignidad a los muertos de la democracia. Democracia que ahora lleva al Parlamento de Aragón, con PP y VOX, a ocultar, a legislar que se olviden los nunca traídos a dignidad, por aquello de la “concordia” (¿que hemos de convenir, cínicos?
Siguen en cunetas, cimas y fosas comunes miles de víctimas que hasta hoy no tiene sepultura digna. No podemos aceptar el discurso tendencioso, de que “lo pasado debe ser solo eso, pasado”.
Hay que reconocer, que hay dos clases de asesinados, los que durante 40 años fueron reconocidos, se levantaron altares para ellos, se mantuvo su recuerdo y su nombre en lápidas; y la de quienes no se sabe dónde está su sepultura y tampoco su nombre. El régimen de Franco había honrado a sus propios muertos, pero había ignorado y perseguido a las víctimas republicanas. La Iglesia, por la ley de Memoria Histórica se vio obligada a retirar placas de homenaje a los <<Caídos por Dios y por España>>.
Mientras no se acalle la conciencia de tener a uno solo sin encontrar, de los que dejaron en las cunetas, tiraran a cimas o enterraran en fosas comunes, tenemos que seguir exigiendo que la sociedad democrática los encuentre y los entregue a los suyos. Nadie, con el más mínimo sentido de justicia puede negar ese derecho anclado en el profundo sentir de un ser humano. Si no fuera así, lo que nos rodea son pedazos de carne con dos ojos; ¿pues conocen el significado de solidaridad o de compasión? Hasta tanto la justicia hecha sea total, hay que aplicarse, con Luis Cernuda, “Recuérdalo tú y recuérdalo a otros”, “Memorial a las víctimas de la Guerra Civil y la Posguerra”.
Me lleva al hartazgo sentir lo de que “no hay que remover el pasado”; cuando el pasado, fue para estos que lo dicen, un pasado de privilegio, de arbitrariedad, de beneficio de un régimen dictatorial en el que solo contaban sus afectos. Y para los demás la represión, la falta de derechos civiles, la falta de trabajo, la miseria y la vida por la supervivencia. VOX nos quiere llevar a algo parecido.
Los campos de trabajo, las cárceles y el valle de los caídos en la posguerra, dejó también más miles de muertos de los vencidos. Y ahora, estoy convencido que algún estrafalario militante de VOX, que niega todo lo hecho en el régimen franquista, los reconocimientos de derechos a las minorías; algunos que conozco, les gustaría emular a aquellos que se pasearon con displicencia por los pasillos que había entre los tumbados en el suelo del Paseo. Aquellos desgraciados hartos de crueles injusticias, de luchadores por la libertad (no esa con la que se llena la boca Isabel Pérez Ayuso), y la República.
Se insulta a la sociedad y se pavonea el cinismo, de esa extrema derecha de la secta del opus dei.
Dicho esto, voy a lo que me ha motivado a ello: cada vez que subo por la escalera lateral, esa cerca de la entrada del aparcamiento municipal, enfurecido, me topo con ese pegado de nombres, con vinilo en color blanco, en la valla de cristales o metacrilato que por ese lado protegen del desnivel de la plaza, como recuerdo de los asesinados baenenses en la guerra civil. Están los del paseo, los de san francisco y unos pocos más y los asesinados, que siendo de aquí, se les asesinó fuera de Baena.
Por razón de la Ley de Memoria Histórica se pegaron los nombres de los que ahí están. Ese acuerdo de memoria histórica en vinilo, ese que significa vergüenza para la Corporación Municipal que propuso tal alarde para la Memoria Histórica. ¿Se puso cuidado, atención o imaginación para hacerlo como se hizo?
La mínima justicia en hacer pública una muerte mantenida en silencio, en secreto, detrás de un dedo en los labios, pidiéndolo. La memoria de los vencidos, después de más de setenta y cinco años y la tramposa memoria de los vencedores, que vivieron de ella y con ella en la impunidad, imponiendo el silencio. ¿cómo se llegó a tal extremo de tacañería y racanería, un Ayuntamiento de Presupuesto Municipal, ¿allá por unos millones de euros? Un Ayuntamiento con un alcalde del PSOE.
Ahí, todos revueltos sin identificación de ¿tú de quién eres?
Hace falta un ejercicio de dignidad. Este ayuntamiento de izquierdas, debe proponer una placa honrosa, de bronce por los menos, que se vea, con los nombres de todos los asesinados, pero para saber, con un guion que separe a unos de otros.
Hay que tener siempre en cuenta, la célebre frase de George Santayana grabada en inglés y polaco sobre una placa negra en el “Leger” de Auschwitz-Birkenau: <<quienes no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo>>.
