Condena unánime al franquismo en Extremadura

PSOE, Podemos y Ciudadanos lanzan en la Asamblea un aluvión de críticas contra Juan Antonio Morales y el propio Monago por no cesarle. Finalmente los cuatro grupos votan juntos para reprobar la dictadura

EL PERIÓDICO DE EXTREMADURA | ROCÍO ENTONADO ARIAS | 13-1-2017

«Quiero mostrar mi lealtad y compromiso con la Constitución y el Estado de derecho que nos hemos dado todos los españoles. Vayan a mi pueblo y pregunten, verán como nada de lo que se ha dicho aquí de mi persona tiene que ver con la realidad». Son las palabras con las que el diputado del PP Juan Antonio Morales se defendió ayer en la Asamblea del aluvión de críticas que recibió del PSOE, Podemos y Ciudadanos (C’s) por su asistencia el pasado 2 de diciembre a una cena de la fundación Francisco Franco.

En el acto, Morales fue premiado junto al alcalde de Guadiana del Caudillo, Antonio Pozo Pitel, con un «diploma de honor» por incumplir la ley de memoria histórica y hornar la obra y figura de Franco. En el pleno de ayer sin embargo, votó junto al resto de su bancada sendas propuestas de pronunciamento del PSOE y Podemos para condenar el golpe de estado de 1936 y la dictadura. Antes, en tono serio y afligido, pidió la palabra para defenderse desde el escaño apelando a su familia, a la que mostró en una fotografía desde su tableta.

Morales ya pidió perdón por lo ocurrido cuando saltó la polémica y dijo incluso que había acudido al acto a título personal, pero su arrepentimiento no convenció al resto de los grupos. «No quiere el escaño más que para llenar su cuenta corriente», le espetó el líder de Podemos, Álvaro Jaén, que le repitió que «no se puede ser demócrata sin ser antifascista».

Al mismo tiempo, la representante de C’s, María Victoria Domínguez, le recordó a Morales que «no hay actitudes de carácter personal que valgan cuando uno acepta un reconocimiento que viene del franquismo. Para cosas personales, se está uno en casa», sentenció.

Cumplir la ley

Aunque diferentes en su redacción, las iniciativas del PSOE y Podemos defendían instar a todas las instituciones públicas a cumplir la Ley de Memoria Histórica, a dignificar las víctimas y a reprobar a los cargos públicos que exalten la dictadura. La del PSOE invitaba además a «promover las medidas oportunas» para que los partidos políticos les expulsen de sus filas.

Las dos salieron adelante por unanimidad, con el voto afirmativo de Morales incluido, tras un tenso debate en el que al diputado, junto al propio José Antonio Monago y en definitiva toda la bancada popular, no le quedó más remedio que escuchar y esperar a que pasara el chaparrón.

Por votar a favor de las propuestas pero no asumir su «responsabilidad democrática» cesando a Morales, el portavoz del Grupo Socialista, Valentín García, criticó el «cinismo y cobardía política» del PP. Un comportamiento, dijo, con el que está amparando las ideas de una dictadura «totalitaria y sanguinaria» que dejó 100.000 desaparecidos, 50.000 crímenes, 270.000 encarcelados o 30.000 niños robados.

«Muchos diputados de la derecha se avergüenzan», dijo García, que criticó a Monago por no tomar la palabra en el debate. Le acusó además de intentar «comprar la dignidad de las víctimas por 25 euros al mes» (en referencia a la paga de 300 euros anuales que creó en su mandato para las mujeres mayores de 75 años que vivieron la guerra y la posguerra) y le preguntó si está «con ellas o con su diputado fascista».

«Cunetas hay a la derecha y a la izquierda de las carreteras», replicó el diputado del PP Miguel Cantero, que lamentó el «ensañamiento público» al que el resto de grupos sometieron a su compañero de filas con dos iniciativas parlamentarias realizadas «a mala fe». Después, Francisco Ramírez, también diputado popular, apostilló que su partido rechaza «todas» las dictaduras y apeló a los argumentos con los que Cristina Teniente condenó el comportamiento de Morales. «Ni francos, ni castros ni maduros», dijo después de instar a Podemos a condenar los regímenes de Cuba y Venezuela o los ataques de ETA.

Sobre el asunto también se pronunció, fuera del pleno, el alcalde de Badajoz y presidente del PP pacense, Francisco Javier Fragoso, que insistió en que la presencia de Morales en el acto franquista «fue un error, una estupidez, una tontería por la que ya pidió perdón». «Sus principios y valores democráticos y constitucionales no están en duda», aseguró Fragoso, que criticó a los que quieren «perder el tiempo alargando este tema para despistar de los verdaderos problemas» que tienen los extremeños, entre ellos la sanidad o las infraestructuras.

http://www.elperiodicoextremadura.com/noticias/extremadura/condena-unanime-franquismo-extremadura_990715.html