La casa del cónsul alemán en Sevilla que renegó de Hitler se cae sin que nadie lo impida

La vivienda de Otto Engelhardt está atribuida a Aníbal González, y se pide su recuperación para varios usos, como la posibilidad de ser un centro para la recuperación de la memoria histórica

Un vivero de la localidad sevillana de San Juan de Aznalfarache guarda entre hierbajos una de las casas más llamativas de la localidad. No solo es importante por su aspecto o arquitectura, sino porque fue la residencia de Otto Engelhardt, el cónsul alemán que renegó de Hitler y fue asesinado durante el alzamiento militar por orden de Queipo de Llano. Pero la casa se está cayendo poco a poco, y nadie parece querer hacer nada por evitarlo.

Para intentar remediarlo, el concejal no adscrito en el Ayuntamiento, Manuel Pérez, ha registrado una petición en la que reclama, entre otras cosas, que la zona en la que se encuentra la vivienda, atribuida al sevillano Aníbal González (arquitecto de la Plaza de España), sea vallada para evitar el acceso de posibles vándalos, y se inicien las acciones para proteger el inmueble cuanto antes.

Otto Engelhardt fue cónsul en Sevilla de 1903 a 1919. Murió fusilado ante las tapias del cementerio de San Fernando en Sevilla. Su rechazo al régimen de los nazis fue tal que, desde la capital sevillana, devolvió a Hitler todas las condecoraciones que había recibido.

La casa, que Engelhardt adquirió en 1914, es propiedad actualmente de la empresa que gestiona el vivero que se encuentra en la misma finca, y la petición de Manuel Pérez está encaminada a que se firme con la misma un acuerdo de permuta de terrenos, de modo que el inmueble pase a manos municipales y el edificio se pueda recuperar.

Una figura de principios del siglo XX

Otto Engelhardt vivió en Sevilla durante más de veinte años, a donde fue destinado como ingeniero en Sevillana de Electricidad y Tranvías de Sevilla, y fue el promotor, entre otras cosas, del alumbrado público y la electrificación del transporte en la capital andaluza, donde el transporte público, hasta entonces, era tirado por mulas.

Para vivir cerca de la ciudad compró en 1914 la citada casa, conocida como ‘Villa Chaboya’, un inmueble de estilo neomudéjar, hasta que fue ejecutado el 14 de septiembre de 1936 ante el cementerio de Sevilla.

La casa estuvo ocupada por sus descendientes hasta hace unos 40 años, y en estos momentos está abandonada.

En un acto público celebrado años atrás en el mismo edificio, la bisnieta del cónsul, Ruth Engelhardt, abogaba por convertir la casa en un espacio público para el disfrute de todos los vecinos del pueblo y, al mismo tiempo, en un lugar destinado a la recuperación de la memoria histórica.

Convenio para recuperar el terreno

El 23 de septiembre de 2020 el Ayuntamiento de la localidad aprobaba el convenio que permitirá obtener, mediante permuta, la propiedad de la finca sobre la que se edifica Villa Chaboya. El convenio está destinado a cancelar la cesión que se firmó en 1990, y que, inicialmente, tendría un periodo máximo de 25 años. Sin embargo, en 2010 se prorrogó hasta 2020, iniciándose un procedimiento de desahucio que se paró por el convenio aprobado por el Ayuntamiento. En esencia, la empresa que gestiona el vivero se compromete a dejar sus actuales instalaciones a cambio de otro lugar en el que trabajar.

No se ha especificado por parte de las fuentes consultadas cuándo se firmó definitivamente, aunque en el mismo las dos partes se dan cuatro años de plazo para cumplirlo, como poco hasta septiembre de 2024.

https://www.eldiario.es/andalucia/sevilla/casa-consul-aleman-sevilla-renego-hitler-cae-nadie-impida_1_9677895.html