AFFNA-36 sigue reclamando los restos de los asesinados y nombrar la vieja cárcel de Iruña como lugar de memoria
NOTICIAS DE NAVARRA | IMANOL VELASCO ZOZAYA | 24-8-2017
Las familias de los 52 fusilados de Valcaldera no cesan en su empeño por encontrar dónde están los restos de sus familiares y lograr un reconocimiento oficial para la matanza perpetrada por los franquistas en este término de Cadreita el 23 de agosto de 1936. Como viene haciendo durante los últimos años, la Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra (Affna-36) organizó ayer un acto de homenaje en el solar donde se ubicó la antigua cárcel de Pamplona, derribada en el año 2012, lugar donde fueron prisioneros los 53 hombres -uno logró huir- que fueron asesinados en Valcaldera. En lo que hoy es un solar, la asociación quiere colocar la puerta de la antigua cárcel, “conservada por el Ayuntamiento de Pamplona”, afirman, y convertirla en un espacio de “memoria democrática”.
Para esta ocasión, el homenaje tuvo la novedad de la colocación de una “placa provisional”, similar a las gubernamentales, que identificó el espacio como lugar de memoria, donde se pudo leer “Cárcel de Pamplona – Iruñeko Kartzela”. Sobre ella los asistentes colocaron rosas rojas, tras la lectura de los nombres de los 52 fusilados, mientras sonaba la música de guitarra y violín. Al acto asistieron la presidenta del Parlamento de Navarra, Ainhoa Aznárez, la parlamentaria de EH Bildu, Bakartxo Ruiz, y el diputado del PSN, Jesús Mari Fernández.
Al igual que en otras ediciones el protagonismo lo tuvieron los testimonios de los familiares de los asesinados en Valcaldera. Ayer, en la explanada frente al Palacio de Justicia, estuvieron Juanjo Ibero, nieto de Román Ibero, y Ángel Urío, en representación de los seis hombres de Obanos fusilados en el paraje de Cadreita.
Testimonios
“Me llamo Román Ibero y en agosto de 1936 me detienen y me llevan a la cárcel de Pamplona. El 23 de agosto me dejan en libertad junto a 52 personas, pero a la salida nos detienen los fascistas y nos llevan a Valcaldera”. Así, a través de la experiencia de su abuelo, comenzó su intervención Juanjo Ibero. “No tuvimos juicio, ni abogado, ni sentencia”, continuó, “los hijos, hijas, nietos y nietas seguimos buscando justicia”, concluyó Ibero, antes de agradecer el apoyo del actual Gobierno en materia de memoria histórica.
Ángel Urío fue el encargado de hablar en representación de las seis familias obanesas. “Los mataron, los enterraron, los secuestraron. Y hoy, 81 años después siguen desaparecidos”, afirmó Urío. De su contacto con familiares directos, hijos e hijas, de algunos fusilados, Urío lanzó una petición, expresa a la presidenta del Parlamento de Navarra, para “que pongan todo el empeño en encontrar estos restos” pues los familiares nunca supieron qué fue de ellos.
Los representantes de Affna-36, Eneko Arteta y Jokin de Carlos, señalaron que su investigación sigue en curso, pues se desconoce donde se encuentran los restos y por qué fueron fusilados a más de 70 kilómetros, pero sí señalaron que fue un “escarmiento a la ciudad y un acto perfectamente organizado y preparado”. Sin embargo, mostraron su deseo de localizarlos, con el trabajo conjunto con el Gobierno de Navarra, durante el próximo año. Ahora, el empeño de Affna-36 está en nombrar el espacio de la antigua cárcel como “lugar de memoria democrática”. “Hace 5 años no estuvimos a la altura pero ahora es posible recuperar la puerta y señalarlo como lugar de memoria democrática”, señalaron.
http://www.noticiasdenavarra.com/2017/08/24/sociedad/navarra/sin-descanso-tras-los-fusilados-de-valcaldera
