Ronda. Homenaje a los fusilados y fusiladas en su 81 aniversario

MEMORIA / MANIFIESTO

RONDA SEMANAL | FRANCISCO PIMENTEL | 11-11-2017

El pinsapo debe de haber visto que este año ha sido uno de los mejores homenajes que hemos hecho a nuestra gente que están en las fosas “esperando el regreso”. Abrió el acto nuestro himno de Andalucía y a continuación leí, en nombre de nuestra junta directiva, el siguiente manifiesto:

Son 81 años que nuestra gente fue secuestrada, encarcelada, aterrorizada, ensangrentada. Son 81 años que nuestras mujeres y nuestros hombres fueron fusilados y hechos desaparecer. ¿Porqué? nos hemos preguntado durante estos 81 años? ¿Porqué? nos preguntamos hoy todavía. Ahora sabemos que los mataron porque eran los mejores, porque defendieron la legalidad republicana. Los mataron porque defendieron la constitución republicana. Porque defendieron la libertad, la igualdad y la fraternidad. Los mataron los malditos violentos asesinos fascistas. Los mataron los egoístas, los acaparadores, los usureros, los banqueros, los especuladores. Los mejores que nunca han nacido en nuestra tierra murieron fusilados por los peores. En los documentos que encontramos se ve claramente el desprecio que los franquistas tenían hacia todas las personas que no fueran como ellos. Después del tiempo pasado, vemos el horror, el terror, el silencio, el hambre. Vemos la alienación religiosa, vemos la alienación cultural, vemos la ruptura social, vemos el sometimiento económico, vemos el ingente latrocinio. Después del tiempo pasado, solo nos queda recuperar a nuestros muertos y enterrarlos dignamente. Pero el fascismo hace todo lo posible porque olvidemos lo que hicieron. Mas los descendientes de aquellos héroes no olvidamos. Llevamos 81 años llorando a nuestra gente y ya es hora de rescatarlos de las fosas y cunetas donde después de asesinarlos a sangre fría los arrojaron.

Ya es hora de que los rondeños sepamos que el 17 Julio 1936 no comenzó una guerra civil. Ya es hora de saber que un grupo de generales dio un golpe de estado contra el gobierno que había sido elegido democráticamente. Que ese golpe fue apoyado militarmente por los nazis de Hitler. Que cientos de miles de personas murieron y que todavía hay más de 150.000 asesinadas por los fascistas tiradas en fosas y cunetas. Ya es hora de decir que esas personas no habían ido a ninguna guerra sino que fueron secuestradas, que fueron hechas desaparecer para atemorizar a todos los españoles. Ya es hora de decir que Pinochet admiró la forma del terrorismo franquista y lo aplicó en Chile y que Videla y otros militares hicieron lo mismo en Argentina. Ya es hora de decir que la agresión no terminó en 1939 sino que los crímenes, torturas y violaciones de derechos humanos se han prologando durante muchas décadas y más allá de la muerte del dictador. Ya es hora de que los rondeños sepamos que el Tribunal Supremo remitió a los familiares de las víctimas a la Ley de la Memoria Histórica, pero el gobierno de Rajoy paralizó el plan de exhumaciones. Ya es hora de que los rondeños sepamos que es una vergüenza que un Estado que se dice democrático tenga sin identificar y sin sepultura a los fusilados por el fascismo.

Hace algún tiempo tuvimos conversaciones de nuestra Asociación de Familiares con la Dirección General de la Memoria Histórica, la Delegación de la Junta en Málaga y nuestro Ayuntamiento para llegar a un acuerdo, pero todo en suspenso ¿Por qué? Principalmente porque nos falta un sitio donde poder identificar a nuestros muertos y guardar sus huesos dignamente, según hemos pedido y exigido los familiares que nos oponemos a que las exhumaciones se hagan de cualquier manera. Son nuestros familiares los que están en las fosas. Pero también eran militantes socialistas, libertarios, andalucistas, masones, comunistas, librepensadores, verdaderas mujeres y hombres republicanos. Mujeres y hombres valerosos que querían la libertad, la igualdad y la fraternidad. Mientras tanto para curarnos del virus fascista que el franquismo nos inyectó a base de pistolas y crucifijos repitamos la poesía de nuestra querida Marisa Peña: Mientras me quede voz – hablaré de los muertos – tan quietos tan callados – tan molestos. –

Mientras me quede voz

hablaré de sus sueños –

de todas las traiciones –

de todos los silencios –

de los huesos sin nombre –

esperando el regreso –

de su entrega absoluta –

de su dolor de invierno. –

Mientras me quede voz –

no han de callar mis muertos.