Sábado 18 N. Homenaje y Reconocimiento a José Arenal, Miguel López y Miguel Cardoso, fusilados el 15/11/1943 tras su fuga del campo de La Corchuela

Homenaje y reconocimiento a los presos del canal José Arenal y Miguel López, fusilados en La Corchuela, y a Miguel Cardoso, fusilado en las tapias del cementerio de Sevilla el 15 de noviembre de 1943

Estos tres presos más los hermanos Manuel y Rafael Fernández, “cazados” en las cercanías del Castillo de las Guardas, así como Pedro Vázquez (único superviviente) se fugaron del campo de trabajo de La Corchuela en octubre de 1943.

El grupo RMHSA de CGT.A que lleva reclamando la señalización de estos lugares desde hace años CONVOCA, coincidiendo con el 74º aniversario, UN ACTO EL 18 DE NOVIEMBRE A LAS 12 HORAS EN EL LUGAR DE LOS FUSILAMIENTOS (La Corchuela, Junto al Aparcamiento interior).

Tras la intervención de varios investigadores y activistas memorialistas de RMHSA, se presentará el proyecto de señalización y divulgación del lugar, remitido al Ayuntamiento de Sevilla y al Consorcio que gestiona el parque periurbano de La Corchuela (foto adjunta). El texto dice:

La Corchuela

En 1940  en la finca de  La Corchuela (Dos Hermanas), propiedad del Conde de Villamarta, se instaló un campo de trabajo conocido como “el campamento” donde comenzó a funcionar una Colonia Penitenciaria Militarizada (SCPM), término con el que el régimen franquista denominó, y popularizó el término, con el objetivo de esconder a los campos de concentración, donde miles de presos políticos (paisanos y militares) “redimían penas” por los trabajos forzados a los que eran condenados en consejos de guerra sin ningún tipo de garantías jurídicas.

En enero de 1940, 29 presos ocuparon tiendas de campaña para la construcción del campo. Estos  fueron: Pedro Beraza Liatorre (Álava), Vicente Borrero Rivas (Lucena. Córdoba), Herminio Cerguera Fernández (Santander), Antonio Dávila Castro  (Vejer de la Frontera. Cádiz), Miguel García García (Cortes de la Frontera. Málaga), Pedro Hañobeitia Arruza (Erandio. Vizcaya), Antonio Irista García (Málaga), Juan Luna González (Coín. Málaga), José Madrona Duarte (Antequera. Málaga), Juan Lozano Moreno (Casabermeja. Málaga), José Márquez Villalba (Riogordo. Málaga), Antonio Martín García (Alhaurín el Grande. Málaga), Miguel Martín Martín (Mollina. Málaga),   

Hasta 1943  pasaron  por “La Corchuela” en torno a 1.500 presos. Después muchos de ellos fueron trasladados al cercano, y nuevo campo de Los Merinales. Se calcula que en Sevilla, a mediados de 1943, había más de 5.000 presos en trabajos forzados en los diferentes campos existentes en el área metropolitana; El Colector (Heliópolis. Sevilla), Los Merinales y El Arenoso (Dos Hermanas), Torre del Águila (Utrera), Las Arenas (La Algaba), Cortijo Caballero (Guillena), Cortijo  Casavacas (La Rinconada), pero también los depósitos de presos de La Isla, Cortijo La Jarilla, Fábrica de Cemento de Villanueva del Río…

Las fugas o los intentos de fugas eran duramente castigados, llegándose en la mañana del 15 de noviembre de 1943, a ser fusilados dos presos (José Arenal y Miguel López, uno, herido, sentado en una silla, a otro de pie) y obligaron a desfilar a todos los internos del campo delante de sus cadáveres, diciéndoles ‘vista a la derecha’. Así se ponía en marcha una dictadura que duro hasta 1978 (publicación de la Constitución)

Desde este campo de trabajo se construyó una parte de El Canal de los Presos y sus acequias correspondientes, que convirtió 80.000 hectáreas en las fértiles tierras que son hoy y que acogen a miles de familias en 10 pueblos de colonización construidos a propósito y la creación, por primera vez en Europa de “latifundios de regadío”. Muchos de los pueblos del medio y bajo Guadalquivir serían irreconocibles sin la aportación “forzada” de esos miles de presos políticos y varios centenares de comunes a los que nunca se les ha reconocido, ni homenajeado, ni reparado.