Asociaciones de la Memoria Histórica consideran que puede afectar a las fosas de la Guerra Civil
EL CORREO DE ANDALUCÍA | VICENTE CÓRDOBA | UTRERA | 19-7-2017
La Asociación de Memoria Histórica AMEHIS y el Foro Construyendo ReDpública han pedido al Ayuntamiento de Utrera que paralice las obras de construcción de un nuevo bloque de nichos en el cementerio municipal de Utrera por poder afectar estos trabajos, según estos colectivos, a los terrenos en los que se ubica la última de las tres supuestas fosas comunes con fusilados y represaliados de la época de la Guerra Civil existentes en el camposanto utrerano.
Estos colectivos pretenden que se paralice dicho proyecto que está realizándose por la escasez de nichos en el cementerio, que está a punto de agotar su capacidad de enterramientos, a la espera de confirmar la extensión y ubicación exacta de la fosa.
Los dos colectivos de la Memoria Histórica han explicado que en un par de días estaba previsto que se publicara en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) el proyecto que habían presentado a la Junta de Andalucía para poder actuar sobre esos terrenos consistente en un excavación arqueológica de la zona, pero el inicio de las obras les ha sorprendido.
La polémica surge porque, mientras desde el Ayuntamiento de Utrera se informa que las obras de construcción de los nichos no afectan a la zona de la supuesta zona donde podría ubicarse la fosa de represaliados de la Guerra Civil, según un estudio de georradar realizado en la zona, las asociaciones de la Memoria Histórica consideran que dicho estudio de georradar no es concluyente. En este sentido afirman que las obras que se han iniciado pudieran afectar al menos en una parte de dicha fosa común. Así, el arqueólogo que está trabajando junto a las entidades denunciantes, Juan Luis Castro, ha afirmado que «la delimitación exacta de la fosa común no la da un estudio de georradar, que puede ser aproximado, sino unas catas arqueológicas que hubieran sido necesarias realizar antes del inicio de la obra de los nuevos nichos».
El Gobierno Municipal PSOE-IU, por su parte, defiende su postura de continuar las obras. Así el portavoz municipal, el edil socialista Francisco Campanario afirma que están actuando de forma correcta ya que «no se aprecian patrones en los radargramas que pudieran llevar a pensar en la existencia de una excavación que se relacionara con una fosa común en la mayoría de la parcela de esta zona». No obstante, reconoce que en dicho estudio también se refleja que «en la zona próxima a la nueva estructura de nichos sí se distingue la acumulación de posibles restos humanos muy juntos entre sí», pero esa no es la zona donde se está actuando.
Desde el Gobierno Municipal de Utrera se ve también «unas ciertas dosis de motivaciones políticas» en la actuación de los colectivos al estar formados por integrantes de otras formaciones política o de miembros del sector crítico de IU contrario al actual pacto de gobierno PSOE-IU.
Los dos colectivos denunciantes niegan motivaciones políticas en su actuación y afirman que las obras, ante las dudas, deberían detenerse hasta realizar la cata arqueológica previa. Por ello han pedido la paralización de las obras al propio Ayuntamiento de Utrera y también a la Dirección General de la Memoria Histórica de la Junta de Andalucía a l que se le ha requerido que intervenga tomando cartas en el asunto paralizando las obras y esclareciendo si con el inicio de las obras el consistorio utrerano «ha podido cometer alguna irregularidad o delito».
Cementerio colmatado
El problema de fondo del cementerio municipal de Utrera es que se encuentra colmatado desde hace casi una década sin que se le haya dado una solución real a este problema más allá de la construcción de unos pocos nuevos nichos cada año. Así este cementerio, que fue creado en el año 1844 por el histórico alcalde Clemente de la Cuadra, cuenta hoy en día con una superficie de unos 25.000 metros cuadrados en los que se distribuyen las cerca de 9.600 tumbas, entre panteones, mausoleos, osarios, nichos y columbarios. Con casi nulas posibilidades de crecimientos más allá del nuevo bloque de nichos que se está edificando.
La solución real al problema pasaría por una ampliación del cementerio para la que hoy día el Ayuntamiento de Utrera no tiene terrenos municipales que lo permitan. La única posibilidad, que lleva demorándose más de una década y hasta ahora no han sabido resolver ni el anterior Gobierno PA-PP ni , de momento, el actual PSOE-IU, pasaría por un acuerdo de compra de una parcela colindante donde se ubica una granja ganadera o en su caso por una expropiación forzosa por vía de urgencia de dicha parcela.
http://elcorreoweb.es/provincia/piden-la-paralizacion-de-las-obras-de-ampliacion-del-cementerio-de-utrera-XX3176077
