Valencia. La Generalitat pacta con el Obispado que se exhume una fosa común de la represión franquista en el cementerio parroquial de Orihuela.

El cementerio parroquial de Orihuela alberga una fosa con los cuerpos de 17 republicanos fusilados por el franquismo en la posguerra

Lucas Marco – Valencia /29/05/2020 – 22:59h

El Obispado de Orihuela-Alicante ha dado el visto bueno a la Conselleria de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática para que se inicien los trabajos de exhumación de una fosa con los restos de 17 republicanos fusilados por el franquismo en 1939 en el cementerio parroquial de Orihuela. 

La Generalitat prepara la licitación de siete lotes para las excavaciones de las fosas de la represión franquista en el territorio valenciano y que permitirá exhumar cuerpos de víctimas del franquismo que permanecen en varias fosas de los cementerio de Castelló, Segorbe, Paterna y Orihuela.  

En el antiguo cementerio civil de la localidad alicantina, separado del resto del recinto cementerial católico, la fosa alberga los cuerpos de 17 vecinos de la zona, con edades comprendidas entre los 22 y los 48 años. Otra fosa con víctimas de la represión republicana en la retaguardia fue exhumada y los restos fueron trasladados al Valle de los Caídos en 1959. 

El Obispado de Orihuela-Alicante administra este recinto y los responsables de la conselleria se han puesto en contacto con el archivero diocesano y con el canónigo del cementerio. Así, el Obispado ha mostrado su predisposición a colaborar con los trabajos de exhumación.  

En Orihuela, según las investigaciones del historiador Vicente Gabarda, hubo dos tandas de ejecuciones. El 24 de octubre de 1939 tres personas fueron ejecutadas y entre el 14 y el 17 de noviembre otras 14 personas fueron fusiladas tras un Juicio Sumarísimo.  

Las víctimas procedían de de Orihuela, Benferri, Jacarilla, Redován, Almoradí, Catral o Torrevieja. Los republicanos fusilados eran jornaleros, albañiles, agricultores, un maestro y un estudiante. 

El cementerio, en cuyas proximidades se erigió un monumento en recuerdo de las víctimas, ha sufrido grandes modificaciones, con la construcción de algunos bloques de nichos y panteones familiares. “Es posible que, aunque alguna fosa de las diferentes sacas de los asesinados no haya sido intervenida directamente, pueda haber sufrido afecciones”, advierte la ficha sobre este lugar disponible en el Mapa de Fosas del Institut Cartogràfic de la Generalitat Valenciana

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