Manuel Pérez Fernández

Osuna
Sevilla

El 10 de agosto de 1887 nace en Osuna (Sevilla) el destacado propagandista anarquista y anarcosindicalista Manuel Pérez Fernández, conocido bajo diversos nombres y motes (El Periodista, Canario, Manuel Peres, Manuel Pérez Fernando, Óptimo, etc.).

Su familia materna, de ideas católicas y bastante reaccionarias, con tres generales del Ejército, emigró a Brasil. En 1905 hacía de ebanista en Río de Janeiro, donde un compañero libertario le introdujo en el pensamiento anarquista, y estudiaba en el Liceo de Artes y Oficios de esta ciudad. E n 1906, a raíz del atentado de Mateo Morral contra Alfonso XIII, se enfrentó a su padre, que condenó el intento de magnicidio. En 1909, después de los hechos de la «Semana Trágica» y del fusilamiento de Francesc Ferrer i Guardia, discutió violentamente con su padre y abandonó el hogar familiar. Carpintero de profesión, pronto empezó a participar en las luchas sociales y sindicales de entonces, como la huelga general insurreccional de 1917.

A partir de 1918 empezó a escribir artículos para el Jornal do Brasil. A finales de ese año, en Río de Janeiro, fundó, con Nicanor Rodrigues y José Maria Pereira, el Centro de Carpinteros y Ebanistas, sociedad que presidió. Con su apoyo, este centro se unió al Sindicato de la Madera bajo el nombre de Alianza de los Trabajadores, de la que fue nombrado secretario. En 1919 fue redactor del semanario anarquista Spártacus y ese mismo año fue muy activo en varias huelgas, lo que implicó su detención y expulsión de Brasil, junto con otros militantes (Manuel Perdigão, Manuel Gonçalves, Everardo Dias, José Carlos, Albano dos Santos, Antonio da Silva Massarelos, Alejandro Azevedo, Manoel Ferreira, Antonio Costa, Anibal Paulo Monteiro, Joaquim Alvarez, Antonio Pérez, Joao Jose Rodrigues, Manoel Pérez, Antonio Prieto, Manuel Gamma, Abilio Cabral, Alberto Castro, Adolfo Alonso, José Cid, Rafael López y Francisco Pereira).

El 29 de noviembre de 1919 llegó, como polizón a bordo del carguero Benavente, en Vigo (Pontevedra) e inmediatamente por indocumentado fue encerrado en la Cárcel Provincial de Vigo y después en la celda 136 de la cárcel Modelo de Madrid y, finalmente, en el convento agustiniano de El Pópulo de Sevilla, convertido en centro penitenciario.

En el penal conoció a varios anarquistas que le proporcionaron contactos en el exterior. Liberado el 6 de enero de 1920, se instaló en Sevilla, donde fue nombrado secretario general del Sindicato de la Madera. En septiembre de ese año fue detenido cuando participaba en una reunión clandestina; encarcelado, después fue desterrado, y conducido en una cuerda de presos, a Cabezas Rubias (Huelva). En este pueblo conoció a Teresa, su primera compañera.

En 1922 fue liberado gracias a la amnistía de José Sánchez Guerra, presidente del Consejo de Ministros, y regresó a Sevilla. En esta época destacó como organizador anarquista y de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT), además de orador, haciendo mítines con Salvador Seguí, Felipe Alaiz y Pedro Vallina. Secretario de la Federación Local de la CNT de Sevilla, fue nombrado también miembro de su Comité Regional de Andalucía. En agosto de 1923 fue nombrado contador del Comité Nacional de la CNT afincado en Sevilla.

Detenido en el domicilio de Vallina, fue desterrado de Sevilla. En 1923 representó a la CNT en la Conferencia de Évora (Alentejo, Portugal), que pretendía unificar la Confederación General del Trabajo (CGT) lusa y la CNT bajo el nombre de Confederación Ibérica de Trabajadores (CIT). En abril de 1924 fue desterrado en Lisboa (Portugal), con Vallina y José Romero, y militó en el grupo anarquista «O Semeador», con Adriano Botelho, José Carlos de Souza, Manuel Joaquín de Souza y otros. En Portugal fue miembro del Comité Nacional de la CGT y de la Unión Anarquista Portuguesa (UAP) y redactor del periódico En Batalha, donde encontró a su amigo José Romero Ortega, que también había sido expulsado de Brasil.

Con Restituto Mogroviejo y otros, fundó el Comité Internacional por la Libertad del Pueblo Español. En 1925 fue expulsado de Portugal y entre octubre de ese año y 1928 residió en Francia (París, Le Havre, Marsella), bajo el nombre de Manuel Pérez Fernando, donde realizó una importante actividad militante y orgánica: miembro del Comité Español de Relaciones Anarquistas (CERA), secretario de correspondencia de la Federación de Grupos Anarquistas de Lengua Española (FGALE), redactor y administrador de Tiempos Nuevos, y colaborador de la revista Prismas (1927-1928).

En esa época mantuvo una estrecha amistad con Liberto Callejas, director de Tiempos Nuevos, compartiendo vivienda. En 1926 asistió al congreso fundacional de la Confederación General del Trabajo Sindicalista Revolucionaria (CGTSR), creado para combatir la influencia estalinista en los sindicatos obreros, y en mayo de ese año en el Congreso Anarquista de Marsella, convocado por la FGALE, que preparó la fundación de la Federación Anarquista Ibérica (FAI) y rechazó las tesis defendidas por Joan García Oliver y Vicente Pérez ( Combina ) favorables a la colaboración política e insurreccional con Francesc Macià i Llussà para derrocar la dictadura de Primo de Rivera. En esta etapa francesa contactó con numerosos personajes de peso del anarquismo internacional, como Nestor Makhno, Piotr Arshinov, Jean Grave, Sébastien Faure, Charles Malato,), Alexander Schapiro, Pierre Besnard, Armando Borghi, Virgilia de Andrea, Christiaan Cornelissen, etc.

En febrero de 1928 regresó a la Península por Cataluña, para atender a su compañera, gravemente enferma, y ​​se estableció en Huelva, pero finalmente ésta murió y quedó viudo con tres hijas. En este 1928 formó parte del grupo anarquista Germinal y colaboró ​​en ¡Despertad!, de Vigo. Intervino en luchas clandestinas y formó parte del Comité de Relaciones de la FAI. En diciembre de 1928 fue miembro del Comité Pro-Presos de Sevilla, creado para paliar la represión del gobernador José Cruz Conde.

En junio de 1929 se unió sentimentalmente a Mercedes, su segunda compañera. Este 1929 trabajó de ebanista en la construcción del pabellón brasileño de la Exposición Iberoamericana de Sevilla, gracias a su amistad con Paulo Vidal, comisario general de la exposición, y fue protegido por el consulado de Brasil, ya que por su dominio de idiomas (castellano, portugués y francés) fue contratado para dirigir el Servicio de Prensa y Propaganda de ese país en la exposición.

En marzo de 1930, con pasaporte brasileño, se marchó con su familia a Bélgica y trabajó, además del mismo cargo en el Servicio de Prensa, en la Exposición Universal de Amberes (Flandes). Después de dos meses de escala en París, en febrero de 1931 regresó a la Península por el País Vasco y se estableció en San Sebastián (Guipúzcoa), donde desarrolló una intensa actividad sindical y revolucionaria, especialmente creando con 17 compañeros el Sindicato de Oficios Varios de la CNT de San Sebastián; meses después, creó la Federación Local con siete sindicatos y de la que fue nombrado secretario general. En el País Vasco traba amistad con Isaac Puente y José Álvarez.

Ya instaurada la II República española, entre el 11 y el 17 de junio de 1931 representó al Comité Regional del Norte de la CNT en el III Congreso Nacional de Sindicatos de la CNT celebrado en el Teatro Conservatorio de Madrid (Congreso del Conservatorio) y fue uno de los redactores de la ponencia sobre «Organización social del porvenir», interviniendo, con Rudolf Rocker, Pierre Besnard, Lucien Huart y Valeriano Orobón Fernández, en el mitin de clausura. También fue el delegado español, junto a Eusebi Carbó, Ángel Pestaña y Josep Robusté, en el Congreso Internacional de la Asociación Internacional de los Trabajadores (AIT), celebrado en el Teatro Barbieri de Madrid. En diciembre de ese año, y por la propia regional, asistió al Pleno de Regionales confederal.

El 4 de abril de 1932 dirigió, con el concejal socialista Manuel Reyes Calafate, una manifestación de 600 personas en el Ayuntamiento de Chipiona (Cádiz) que acabó en unos duros enfrentamientos con la Guardia Civil y los carabineros, que se saldaron con dos obreros muertos. En mayo de 1932, a petición del Comité Nacional de la CNT y por huir de la represión, marchó a las Islas Canarias para reorganizar e impulsar los sindicatos confederales, y donde en junio de ese año entró a formar parte del Comité de Defensa Proletaria. Durante su etapa en Santa Cruz (Tenerife) dirigió el periódico En Marcha, fue secretario general del Comité Regional de la CNT canaria e hizo varios mítines. A partir de esa época fue colaborador habitual de la barcelonesa Solidaridad Obrera.

A principios de enero de 1933 encabezó una huelga general revolucionaria en Santa Cruz (Tenerife) que dio lugar a duros enfrentamientos con las fuerzas del orden. Participó activamente en el levantamiento revolucionario de diciembre de 1933 en Tenerife y por ese motivo fue detenido y encarcelado 45 días en Zaragoza —fue liberado porque el proceso fue sobreseído por la «desaparición» de las pruebas, hurtadas por militantes anarquistas—.

A mediados de marzo de 1934 regresó a Santa Cruz (Tenerife). En noviembre de 1934 fue desterrado oficialmente por las autoridades gubernativas de Canarias. Actuó clandestinamente en Sevilla y en Cádiz, ayudando a Vicente Ballester en la organización confederal gaditana. Después se instaló en Palma (Mallorca, Islas Baleares),(1934-1936). Entre 1935 y 1936 realizó varias giras de conferencias (comarca de Cádiz, Barcelona, ​​Terrassa, Zaragoza, etc.). En enero de 1936 ingresó en la redacción de Solidaridad Obrera de Barcelona, ​​junto a Manuel Villar, Liberto Callejas, Josep Peirats, Alejandro Gilabert y Francisco Ascaso.

El 5 de enero de 1936 intervino, con Buenaventura Durruti, Francisco Carreño y Joan García Oliver, en el mitin confederal celebrado en el Teatro Olympia, primero que se realizaba desde la ilegalización del sindicato a raíz de los Hechos de Octubre de 1934 En febrero de 1936 intervino en Mataró en el mitin de unificación con los trentistas y, con Ramón Álvarez y Francisco Isgleas, realizó una gira de propaganda y organización por las comarcas gerundenses. En mayo de 1936, como delegado del Sindicato de la Madera de Barcelona, ​​asistió al Congreso de Zaragoza de la CNT, donde defendió la creación de la Confederación Ibérica de Trabajadores (CIT) y formó parte de la ponencia sobre «Comunismo Libertario».

El 18 de julio de 1936 embarcó a bordo del Ciudad de Valencia hacia Mallorca, como representante de Solidaridad Obrera, para asistir al I Congreso Regional de las Islas Baleares y el levantamiento fascista lo cogió a isla, donde el golpe militar había triunfado. Escondido en la casa del barrio palmesano de La Libertad (actual La Soledad) de la cenetista Julia Palazón, cuatro meses después pudo huir de Mallorca, con 11 compañeros, y el 21 de noviembre de 1936 llegó a Ciutadella (Menorca). En esta isla dirigió el periódico confederal La Voz de Menorca. A finales de diciembre de 1936, a bordo del destructor Ciscar, que había logrado eludir el bloqueo naval menorquín, llegó a Valencia. En esta ciudad realizó diversas tareas propagandísticas y se mostró bastante crítico con el colaboracionismo gubernamental confederal.

En 1937 publicó en Valencia el folleto Cuatro meses de barbarie. Mallorca bajo el terror fascista —reeditado en 2009 en Mallorca por el Grupo de Estudios Libertarios «Los Olvidados»—, que salió en castellano, inglés y francés —la traducción en esta última lengua fue hecha por el cineasta anarquista José María Estívalis Calvo (Armand Guerra)—.

El 5 de enero de 1937 intervino en un mitin confederal en el Gran Price de Barcelona y en febrero de 1937 marchó para realizar una gira de propaganda y para recaudar fondos por el Midi francés, con Armand Guerra, David Antona, Vicente Mirande y Fontaine. Durante los hechos de Mayo de 1937 luchó en La Torrassa de Barcelona, ​​donde vivía su familia, y se opuso a la estrategia pactista y derrotista de Frederica Montseny y Joan García Oliver.

El 11 de mayo de 1937 representó a la CNT, la FAI y la Federación Ibérica de Juventudes Libertarias (FIJL) de Cataluña en el Pleno Nacional de Valencia, donde se acordó no apoyar la política del presidente del gobierno español Juan Negrín; en este pleno fue nombrado miembro del Comité Peninsular de la FAI, con Germinal de Souza, Roberto Cotelo, Jacobo Prince y José María Lunazzi (El Gringo). Tras recuperarse de una enfermedad en Igualada, donde dio mítines y conferencias y colaboró ​​en su Boletín, hizo una gira de mítines en Gelida y el Alt Penedès.

En septiembre de 1937 se encargó en Barcelona de la dirección de Ruta, órgano de la FIJL, dio conferencias sobre las Juventudes Libertarias. En julio de 1938 se marchó a Orán (Argelia) en misión propagandística.

En septiembre de 1938 ocupó la secretaría del Comité Regional de Andalucía de la CNT en Baza (Granada) y en julio de ese año dio un mitin en Barcelona. En febrero de 1939 asistió al Pleno Nacional de la CNT celebrado en Valencia. Con el triunfo fascista, se negó a exiliarse y fue detenido en abril de 1939 en el puerto de Alicante. Pasó por los campos de concentración de Los Almendros y Albatera y por la Cárcel Provincial de Sevilla y en 1941 fue liberado gracias a las presiones del consulado de Brasil gaditano.

En julio de 1941, con el apoyo de Solidaridad Internacional Antifascista (SIA), llegó a Brasil y se estableció en Río de Janeiro, donde trabajó de contable en una imprenta. En Brasil desarrolló una intensa labor militante, haciendo propaganda antifranquista y denunciando las maniobras comunistas.

A partir de 1945 se relacionó con el grupo «Tierra y Libertad» de México. En 1946 fue uno de los fundadores, con Edgard Leuenroth, Edgar Rodrigues y Pedro Catallo, y redactores del periódico Ação Directa. Dio mítines y fue uno de los organizadores del Congreso Anarquista de São Paulo, que celebró entre el 17 y el 19 de diciembre de 1948.

Durante los años cincuenta formó parte del grupo anarquista alrededor de José Oiticica, con Dalmau, Navarro, Cubero y otros. En 1953 murió en Río de Janeiro su compañera Mercedes.

En octubre de 1961 representó a Río de Janeiro en el Congreso de Federaciones Locales del Núcleo de la CNT de Brasil y en 1963 apareció en un mitin contra el dictador portugués António de Oliveira Salazar.

Durante su vida colaboró ​​en numerosas publicaciones libertarias, de las cuales algunas fue redactor y director, como Ação Directa, ¡Campo Libre!, CNT, Cultura y Acción, Cultura Obrera, ¡Despertad! En Marcha, Esfuerzo, Espoir, Fuego, Horizontes, Liberación, Más Allá, Nervio, Prismas, Ruta, Solidaridad Obrera, Solidaridad Proletaria, Spártacus, Tiempos Nuevos, La Tierra, Trabajo, La Voz de Menorca, etc. Es autor de los folletos Abajo las armas y Redención.

Manuel Pérez Fernández murió el 16 de junio de 1964 en una residencia para ancianos de Río de Janeiro (Río de Janeiro, Brasil). En 2012 la Asociación Isaac Puente publicó sus memorias bajo el título 30 años de lucha. Mi actuación como militante de la CNT y anarquista español, que escribió en 1951 en Río de Janeiro y donde dice que estuvo encerrado 53 veces en prisiones de Brasil, España, Francia y Portugal.

Fuente: Miguel Montenegro Muriel: https://www.facebook.com/groups/1591766107709384/posts/3491630217722954/