Miguel Fortes López nació en La Zarza (Calañas, Huelva), el 3 de diciembre de 1915. De pequeño lo llevaron a El Cerro de Andévalo (Huelva) donde era su madre y donde nacieron sus hermanos. Era de campo y socialista. Huyó a la sierra y alcanzó la zona republicana. Al final de la guerra cruzó la frontera francesa y fue internado en el campo de Saint-Cyprien, en la playa, para luego pasar al de Barcarès, con su paisano y amigo Blas de la Corte. El 29 de noviembre de 1939, poco después de comenzar la guerra contra Alemania, mi padre y su amigo Blas de la Corte se alistaron en los Regimientos de Marcha de Voluntarios Extranjeros (RMVE), pasando al centro de reclutamiento de Perpignan. Luego fueron destinados al norte, cerca de la frontera belga —dice su hija Isabelle— y el 6 de junio de 1940 mi padre fue capturado por los alemanes en Marchélepot y muy cerca, en Fresnes-Mazancourt, cayó también prisionero su compañero Blas.
Miguel Fortes fue conducido al Stalag I-B, en la localidad alemana de Hohenstein, en Prusia oriental (hoy Polonia), con el número de prisionero 29.010. No sabemos el tiempo que permaneció allí, pero a fecha 1 de julio de 1942 y durante tres años dispuso de un pase para circular libremente alrededor de la aldea de Wyranden, una zona agrícola. Allí se hallaba una granja propiedad de unos finqueros alemanes donde Miguel trabajaba. La aldea se encontraba a 15 kilómetros al sur de Allenstein, donde estaba el cuartel militar alemán. En la granja estuvo el resto de la guerra hasta que el territorio fue liberado por soldados rusos. Fue repatriado el 24 de abril de 1945 y fijó su residencia en Francia. Ejerció varias profesiones: minero, leñador, albañil, todos ellos oficios duros -finaliza Isabelle- mi padre era un hombre valiente y trabajador y me siento muy orgullosa de él.
En 1952 contrajo matrimonio con una joven francesa y tuvo cinco hijos, Gabriel, Isabelle, Michel, Christian y Richard. Regresó de vacaciones a El Cerro en 1975 y pudo ver con vida a su madre, a la que no veía desde hacía cuarenta años. Conservó la nacionalidad española y falleció en Limoges, el 15 de diciembre de 2005, a la edad de noventa años.
Fuentes: Documentación de Isabelle Fortes (hija, residente en Francia) • Archivo Municipal de El Cerro de Andévalo, Libro Quintas, leg. 65 • Registro Civil de Calañas, Nacimientos, Tomo 46, fol. 131 • J. Ramírez Copeiro del Villar: En tierra extraña. El exilio republicano onubense, autor-editor, 2011.
