HUELVA YA | 19-1-2018
Un total de 194 vecinos de Calañas y sus diferentes entidades fueron asesinados durante la guerra y la posguerra en distintos puntos de la provincia. 147 murieron en la zona, otros 30 vecinos en Huelva capital, 4 en El Cerro, 3 en Trigueros, 2 en Villanueva de las Cruces, 2 en Zalamea, 1 en Aracena, 1 en Nerva, otros 2 en los municipios pacenses de Fregenal de la Sierra y Llerena, más otro en la zona del Ebro. Además, en Calañas se les dio muerte a otras 20 personas más procedentes de El Cerro, Alosno, Moguer, Valverde del Camino y Villanueva de las Cruces. Con estos datos encima de la mesa han quedado inauguradas hoy en La Zarza-Perrunal sus I Jornadas de Memoria Histórica, enmarcadas en el ciclo que la Asociación de Memoria Histórica de la Provincia de Huelva (AMHPH) desarrolla en desde el pasado otoño en cinco localidades onubenses.
La inauguración ha corrido a cargo del presidente de la AMHPH, Fernando Pineda, del alcalde pedáneo de la entidad, Juan Manuel Serrano, y del delegado del Gobierno de la Junta en Huelva, Francisco Romero, que es, además, natural de La Zarza, por lo que ha mostrado “especial interés en compartir con sus vecinos estos momentos que recuerdan episodios muy duros de la historia de nuestra provincia”, ha dicho Pineda, quien ha agradecido el gesto, agradecimiento que hace extensible a Juan Manuel Serrano y también al alcalde del municipio de Calañas, Mario Peña. “Todos ellos nos han dado toda clase de facilidades para que pudiéramos desarrollar el trabajo previo que requiere organizar unas jornadas como estas”, ha señalado el presidente de la AMHPH.
El delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Huelva ha subrayado durante su intervención que el Ejecutivo autonómico apoya la celebración de estos actos porque son “una oportunidad para recordar nuestra historia y porque es de justicia recordar y honrar a alrededor de 200 víctimas de La Zarza- Perrunal, Sotiel, La Torerera y de Calañas que se esforzaron por conseguir un régimen democrático”.
Entre estas víctimas se contabiliza una decena de mujeres que fueron ultrajadas, a veces, únicamente por ser mujeres. “Por eso, aprovecho estas jornadas para homenajear aquí a Amparo Ramírez González, ama de casa, de 32 años que fue asesinada en El Perrunal, el 21 de agosto de 1936; a Asunción García, de 32 años, y Ana Pérez, de 49 años de La Torerera, quienes corrieron la misma suerte el 6 de octubre; a Isabel Rodríguez, el 8 de noviembre, así como al menos a otras seis mujeres más. Muchas otras fueron encarceladas, vejadas, paseadas, rapadas,…”, ha afirmado Romero.
“Quiero resaltar -añadió- que la inclusión de la Memoria Democrática en la Consejería de Presidencia y Administración Local demuestra un impulso muy importante por parte del Gobierno andaluz, fortaleciendo la posición de nuestra comunidad autonómica que ya se encuentra en la vanguardia en el desarrollo de políticas públicas de memoria”. Junto a ello, la Ley 2/2017, de 28 de marzo, de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía ha supuesto un punto de inflexión de un largo camino que se inició hace casi dos décadas, concretamente en 1999, y que ahora se consolida.
Este año, además, hay un importante incremento presupuestario para el desarrollo de la Ley de Memoria Democrática de Andalucía, en capítulos destinados a estudios, jornadas y en actuaciones específicas en fosas y al proceso posterior de identificación genética que supone un incremento del 154% con respecto a 2017.
De acuerdo con esta ley, es la Administración de la Junta de Andalucía la obligada a realizar las actuaciones necesarias para recuperar e identificar los restos de víctimas desaparecidas y de elaborar mapas de localización de restos, así como la responsable de autorizar la localización, exhumación e identificación de restos y de autorizar la construcción o remoción de terrenos en los que se tenga conocimiento de la existencia de restos.
Relativo a la reparación a las víctimas, la legislación encomienda a la Administración de la Junta de Andalucía que promueva medidas de reparación y reconocimiento de las víctimas en el marco del Plan Andaluz de la Memoria Democrática, y declara el 14 de junio como el día de su recuerdo y homenaje. En relación a las fosas comunes en cementerios, la Junta de Andalucía impulsará el protocolo de actuación para dignificar las fosas comunes de las víctimas y asegurar su conservación para ser exhumadas en los cementerios municipales.
En la Ley de Memoria se recoge también la creación del Consejo Andaluz de la Memoria Histórica y Democrática de Andalucía que promoverá la creación de un Grupo de trabajo o comisión independiente. Ese grupo creará en las distintas provincias Puntos de Atención a las Víctimas. En este sentido, Huelva cuenta ya con la Oficina de Memoria Democrática, que viene desarrollando funciones de información y asesoramiento, asuntos de actuaciones específicas en fosas, de Lugares de Memoria Democrática y fundamentalmente establecer relación con familiares de víctimas, ayuntamientos, colectivos memorialistas, así como informar de ayudas de subvenciones y proyectos vinculados con la memoria.
Por su parte, el alcalde pedáneo ha agradecido enormemente a la AMHPH que haya tenido a bien elegir esta zona de la provincia para celebrar este cuarto encuentro memorialista. Serrano ha querido destacar que “la represión allí fue muy cruel y que los episodios vividos marcaron la vida de muchas personas que no han podido olvidar y cuya dignidad no ha sido tenida en cuenta aún, por lo que ha destacado que la Ley andaluza ayudará mucho a que la gente sienta que se les tiene en cuenta y que su sufrimiento pueda ser resarcido”.
La jornada ha contado con la conferencia del historiador Cristóbal García, profesor de Historia Contemporánea de la Universidad de Huelva y experto en la historia de Huelva y su provincia de mitad del siglo XX. Mañana sábado tendrán lugar los testimonios de investigadores locales; y gracias a la exposición que ofrecerá el investigador de la Asociación Miguel Ángel Harriero, quien ha rastreado los archivos municipales en las semanas previas a estas jornadas, se ofrecerán datos que nunca antes han salido a la luz.
Casi 200 vecinos de Calañas fueron asesinados en la guerra y la posguerra