El Gobierno reactiva las subvenciones para exhumar fosas del franquismo, dos en Galicia.

Inyecta 106.400 euros a la Xunta para recuperar los restos de 14 represaliados en Cotobade y O Pino | Las asociaciones habían reclamado que el Estado asumiese todo el proceso

R. Prieto / A Coruña | 03·07·21 | 04:00

La memoria custodia más de 5.000 fosas del franquismo que todavía hoy tienen atropados a más de 130.000 represaliados en España. El testimonio de familiares y vecinos ha sido clave para dar con el paradero de cientos de sepultados en montes y tapias de cementerios durante la dictadura. No hay pueblo en Galicia donde no haya sido paseado algún vecino y sus restos permanezcan todavía hoy enterrados en una fosa que solo los más viejos del lugar saben ubicar. Sin el silencio roto por los testigos de las ejecuciones, esa búsqueda contra reloj de las víctimas del régimen de Franco no habría permitido recuperar esos huesos vencidos y entregárselos a sus familiares.

A un mes de cumplirse 15 años de la primera exhumación de una víctima del franquismo en la comunidad gallega (el alcalde de Castro de Rei Severino Rivas, fusilado en la localidad lucense de Portomarín en octubre de 1936), el Gobierno central asumirá el coste de dos desenterramientos en la comunidad gallega: en Cotobade (Pontevedra) y O Pino (A Coruña), según anunció ayer el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones. Y lo hará, por primera vez, a través de ayudas directas dirigidas a la Xunta para que sea el Ejecutivo gallego el que conforme los equipos para ejecutar las exhumaciones y dignificar víctimas y lugares. En total, 106.395 euros de subvenciones para todo el proceso.

Hasta ahora, han sido los que han asumido esta tarea con una red de colaboradores (historiadores, arqueólogos y forenses, entre otros) que de manera voluntaria en sus vacaciones y fines de semana se han encargado de poner nombre a cada uno de los paseados en las fosas del franquismo. Desde entonces, voluntarios de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), grupo originario del Bierzo leonés promotor de las primeras exhumaciones en España, han abierto 19 fosas en la comunidad y han devuelto a más de 60 familias gallegas los restos de sus desaparecidos en la dictadura.

Hasta el año 2012, contaban con subvenciones del Ministerio de Presidencia para el proceso de exhumación. Pero desde entonces las asociaciones financian su actividad con premios y donaciones internacionales: un sindicato noruego de electricistas aportó 6.000 euros en 2014 y la Fundación Abraham Lincoln de Nueva York entregó 100.000.

Con la nueva versión de la Ley de Memoria Histórica, bautizada como Ley de Memoria Democrática, el Gobierno de Sánchez ha rescatado la política de subvenciones, pero no asumirá el proceso completo, como reclaman desde hace años los colectivos de memoria histórica.

Según anunció ayer el delegado del Gobierno en Galicia, el Ejecutivo apoyará la búsqueda, identificación y dignificación de personas desaparecidas durante la Guerra Civil y la dictadura en Galicia con una primera aportación de 106.395,08 euros a la Xunta para actuar sobre dos fosas comunes en Cotobade y O Pino. Es la primera vez, destacó Miñones, que se habilitan ayudas directas a las comunidades para las actividades de búsqueda e identificación de represaliados.

El Boletín Oficial del Estado formalizó ayer la transferencia a la Xunta, que deberá desarrollar estos trabajos en los próximos meses. En concreto, se actuará sobre la fosa del cementerio de Tenorio, en Cerdedo-Cotobade donde se estima que están enterradas 11 víctimas, y otra en el lugar Amenal, en O Pino, donde se señalan tres represaliados. La ayuda contempla la creación de un grupo multidisciplinar con historiadores, forenses, arqueólogos y otros especialistas para ejecutar estas tareas y dignificar víctimas y lugares.

El reparto de estos 106.395,08 se enmarca dentro del Plan Cuatrienal, que pretende dar respuesta a las recomendaciones dirigidas a España por los principales organismos internacionales de Derechos Humanos. La intención es intervenir en un total de 557 fosas en el conjunto del país.

Desde la ARMH criticaron ayer la “propaganda” de la Delegación del Gobierno al anunciar estas ayudas y hablar de Guerra Civil, cuando en “Galicia no existió”, al tiempo que censuraron que “omitiese hablar de asesinatos y de los asesinos”.

“Competir por las ayudas”

“Se habla del dinero destinado por el Estado a la memoria en Galicia para vender una gestión que incumple las exigencias de la ONU al Estado español porque no se garantiza a las víctimas el acceso a la Justicia”, advierten desde el colectivo.

Denuncian además que el plan de choque anunciado por el Gobierno lo llevan haciendo los colectivos de memoria “que se han chocado con la inactividad del Estado y la política de subvenciones que obliga a competir a las familias de los desaparecidos a ver cuál recibe algo de ayuda económica y cuál no”.

Más de 200 familias gallegas se movilizan para buscar a sus desaparecidos en la dictadura

Durante décadas se mantuvieron en silencio entre las tinieblas de la represión. El trabajo de los colectivos de la memoria histórica ha sacado a muchas familias de la sombra del franquismo que todavía hoy pesaba sobre ellos y que les impedía dar el paso y buscar a los suyos. En muchos casos sin saber qué había sido de ellos ni dónde yacían sus restos.

En la actualidad, son más de 200 familias gallegas las que se han puesto en contacto con la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) para dar con el lugar donde ocho décadas después del fin de la guerra siguen enterrados sus allegados. Un niño que escuchó unos tiros, un vecino que vio dónde se cavaba una fosa, nietos que conocieron al calor de la lareira la represión a la que fue sometida su aldea durante la Guerra Civil y la posguerra, abuelos que guardan todavía hoy en su retina el horror de los paseados, familias en las que aún hoy no se habla de la represión del franquismo… Son algunas de las piezas del puzle de la memoria que aún está a medio construir.

La falta de testigos y el miedo a hablar se convierten en el principal obstáculo para los colectivos que llevan años recorriendo el país para recuperar los restos de los represaliados. Desde 2010, los voluntarios de la ARMH exhumaron más de 200 fosas en España y pusieron nombre a más de 1.400 víctimas.

https://www.laopinioncoruna.es/galicia/2021/07/03/gobierno-reactiva-subvenciones-exhumar-fosas-54615499.html