Extremadura. ARMHEX: “Los derechos de las víctimas del franquismo no pueden ser moneda de cambio”

ARMHEX: “Los derechos de las víctimas del franquismo no pueden ser moneda de cambio”

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura expresa su “más profundo rechazo por el uso como moneda de cambio en las negociaciones” políticas para alcanzar el gobierno de la Junta de Extremadura.

Ante “una cuestión tan sensible para miles de familias extremeñas que aún siguen buscando a sus seres queridos por cunetas y fosas clandestinas”, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura (ARMHEX) expresa, mediante una nota de prensa, su rechazo a ser moneda de cambio en las negociaciones de los partidos políticos para alcanzar el gobierno de la Junta de Extremadura.

Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura (ARMHEX) expresa, mediante una nota de prensa, su rechazo a ser moneda de cambio en las negociaciones de los partidos políticos para alcanzar el gobierno de la Junta de Extremadura

“La Ley 20/2022, de 19 de octubre, de Memoria Democrática constituyó un avance para el reconocimiento de las víctimas de la guerra de España y la dictadura franquista, así como para implementar unas políticas públicas integrales de memoria democrática en pro de la convivencia pacífica y los valores democráticos, al nivel de los países más avanzados, a partir de los principios de verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición, principios y directrices básicos del Derecho Internacional, recogidos por la doctrina de las Naciones Unidas”, explican en la nota.

La memoria, el reconocimiento, la reparación y dignificación de las víctimas del golpe de Estado, la guerra civil y el franquismo, representan, según el preámbulo de la ley y tal y como explica la ARMHEX, “un inexcusable deber moral en la vida política y es signo de la calidad de la democracia. La historia no puede construirse desde el olvido y el silenciamiento de los vencidos. El conocimiento de nuestro pasado reciente contribuye a asentar nuestra convivencia sobre bases más firmes, protegiéndonos de repetir errores del pasado. El olvido no es opción para una democracia”. También la Ley 1/2019, de 21 de enero, de memoria histórica y democrática de Extremadura, vigente desde hace más cuatro años, se basa en los principios de verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición, establecidos por el Derecho internacional.

“La historia no puede construirse desde el olvido y el silenciamiento de los vencidos. El conocimiento de nuestro pasado reciente contribuye a asentar nuestra convivencia sobre bases más firmes, protegiéndonos de repetir errores del pasado. El olvido no es opción para una democracia”

“No se puede derogar una Ley como la extremeña que en su artículo 1 recoge de forma amplia e integral cuál es su objeto, que no es otro que el de recuperar la memoria histórica en relación con las personas extremeñas que padecieron persecución o violencia por razones políticas, ideológicas, de creencia religiosa, de género o identidad y de orientación sexual durante la Guerra Civil y la Dictadura, restituyendo, reconociendo y rehabilitando la memoria de las que fueron represaliadas en nuestra región. Así como establecer algo tan elemental, como el derecho de las personas descendientes directas de las víctimas de la represión que así lo soliciten, a exhumar a sus familiares y darles una sepultura digna, incluyendo todas las actividades de indagación, localización e identificación de las personas desaparecidas y cuyo paradero se ignore”, afirma la asociación.

La ARMHEX considera “que las administraciones públicas tienen la obligación de atender los derechos de las víctimas y sus familiares, quienes, en muchos casos, tras más de cuarenta y ocho años desde la muerte del dictador, siguen sin conocer dónde se encuentran los restos de sus seres queridos y los hechos acaecidos. Y aquellos que aspiren a dirigir nuestras instituciones deben respetarlos”. Ante las negociaciones entre los partidos políticos que aspiran a gobernar la Junta de Extremadura, la asociación afirma que la Ley “no se puede derogar de un plumazo con lo mucho que ha costado construir durante todos estos años”. Y añade: “No se puede ser equidistante y poner al mismo nivel a las víctimas y a los que fueron responsables de graves violaciones de los derechos humanos, al igual que no se hace con el terrorismo y sus víctimas. No podemos permitir la pervivencia de inaceptables neutralismos y equidistancias, que no son sino viejos tópicos heredados del vetusto régimen antidemocrático”.
Por todo ello, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura, hace un llamamiento a las víctimas, a los partidos políticos, y a la sociedad en general a no permitir una vuelta atrás en un tema tan sensible para tantas familias extremeñas.