Imanol. Por la memoria y la historia de nuestra gente, ¡¡viva la anarquía!!

Por la memoria y la historia de nuestra gente, ¡¡viva la anarquía!!

Repaso a un mes de marzo intenso. Con el homenaje a Puig Antich como plato fuerte pero sin olvidar a quienes no tiene nombre, pero siempre estuvieron.
Imanol

Saludos gente que lee. Se acerca el fin de mes y por lo tanto toca artículo guerrillero. Ni siquiera me había planteado el tema a tratar, pues ha sido un mes movido, que me ha tenido de aquí para allá. De primeras iba a meter el sabotaje que realizó la guerrilla libertaria catalana al polvorín de Santa Creu  d´Olorda el 18 de mayo de 1947, pues no es muy conocido fuera de Cataluña, y es un tema interesante. Pero cuando he empezado el resumen de este mes, ya he visto que se iba a alargar, así que me he decidido por un cambio de planes, y hacer un pequeño recorrido por actos, gentes y lugares que he transitado durante estos días.

Empezamos el mes de marzo en Barcelona, con el homenaje a Puig Antich por el 50 aniversario de su ejecución por parte del estado. Ejecución al garrote vil, a mala ostia, con saña y un proceso lleno de pruebas apañadas. Su familia y su gente cercana aún continúan luchando por su memoria y denunciando todas aquellas irregularidades. Mucha gente, muchas caras conocidas, otras por conocer, buen calendario de actos, y como no, la “progresía oficial”, intentando apropiarse de parte de la historia y de la memoria libertaria, un clásico, vaya.

Y entre acto y acto, el que subscribe estas lineas, trataba de sacar algo de tiempo para su agenda extraoficial. Un ratito en Vallcarca, en La Riera, para echarme un cafelito y ponerle cara a Sandra, nieta de Domingo Labrador Guiral, guerrillero libertario abatido en el pueblecito oscense de Santa Eulalia de Gállego, tras un enfrentamiento con la guardia civil el 3 de agosto de 1946. Llevábamos tiempo escribiéndonos, pero a veces las distancias es lo que tienen. Espero que nos reencontremos pronto.

Vuelta a las jornadas y reencuentro años después con Myrtille, de los Gimenólogos. En el libro que escribí sobre Manolo Huet, hay un capítulo sobre el grupo de Perpiñán, del que me costó encontrar fuentes para escribirlo. Pues resulta que Myrtille es hija de Jordi Gonzalvo, miembro de dicho grupo. A ver si voy mejorando mi manera de hacer preguntas, y sobre todo, a quien se las hago.

Ya puestos, aprovecho este espacio para lanzar una pregunta y cruzar los dedos para que suene la flauta. En el libro “A Zaragoza o al charco”, escrito por los Gimenólogos, se hablaba de la explosión que costó la vida entre otras personas, a Virgilio Garsaball, mientras manipulaban un explosivo en Grenoble allá por los años 70. Si alguien tiene cualquier información sobre el tema, por favor que se ponga en contacto conmigo, que mi amigo David, familiar de Virgilio, estará más que contento de recibirla.

Seguía yo haciendo mis piruetas con el tiempo, pero también saqué un rato para ir a conocer a Jonas y Nuria, un sueco y una catalana que fueron amigos de Juan Sánchez “el Pelao”. “El Pelao” tuvo una vida intensa, y según me contaba Jonas, consiguió salir airoso de las tres penas de muerte que le cayeron a lo largo de su existencia. Lo condenaron los estalinistas durante la guerra civil, los nazis durante la 2ª Guerra Mundial, y luego el gobierno francés por el atraco de Lyon de 1951. Acabó desterrado en Suecia, que fue donde se conocieron. Nos quedan unas cuantas conversaciones al respecto, mientras tanto, espero que Nuria se recupere lo antes posible y que volvamos a vernos pronto.

Y pese a mi dispersión, las jornadas seguían. Charlas, conciertos, visita a la tumba de Salvador en Montjuich, el flipante mural del Roc, unos centros alucinantes donde se hacían las actividades, que para la gente de provincias como yo, no hacían más que dejarme con cara de tonto, la cuadrilla, las anécdotas, las historias, un no parar.

Y para el lunes, ya con el homenaje terminado, a mí me tocaba el plato gordo. El programa que grabaron mi querida cuadrilla de Barrio Canino en diciembre, con respecto al libro de Manolo Huet, y que colgaron este mes de marzo, ya apuntaba maneras. Escuchándolo, resulta que una de las últimas preguntas, era referente a la familia de Huet, y mi respuesta, pues que no había sido capaz de encontrarlas, o encontrarlos, muy a pesar mío. Pero esta gente canina tiene mucho olfato, y no hace preguntas al azar. Casualidades de la vida, gracias al video que colgó la Fundación Anselmo Lorenzo de la presentación del libro de Huet en Madrid, resulta que la familia de Manolo, si, ni más ni menos que de Manuel Huet Piera, “el Murciano”, esa familia que yo había sido incapaz de encontrar, se había puesto en contacto con la editorial, y querían conocerme. Cuando me enteré, primero me lo flipé, me emocioné, y luego me puse súper nervioso, como un mocete o una moceta antes de su primera cita, joder, lo que es la vida. Pues el lunes comí con la familia, en el barrio de Gracia, y yo me lo pasé como un enano, y creo que la descendencia del “tío Manolo” también estuvo a gusto. Luego, se vinieron a la presentación del libro de Huet en el Ateneu Llibertari de Gracia, fue un día que se me quedará grabado y que espero poder repetir con ellos y ellas. De hecho, me ha gustado mucho el pasar de “el Murciano” al “Tío Manolo”, mucho más de andar por casa.

Pero no se acaban aquí las aventuras de Ni cautivos ni desarmadas. Pocos días después, junto a mi compañera, preparamos viaje a Girona. El 8M lo pasamos por la mañana en Berga, con parte de la cuadrilla, donde fuimos a algunos de los actos, y por la tarde nos fuimos a la ciudad antes citada a ver a Floreal Cuadrado, el falsificador de los GARI, o de 1º de Mayo, grupos autónomos de los años 70. Nos preparó habitación y nos estuvo contando montones de cosas y anécdotas de aquellos tiempos de lucha, tanto por la noche, como por la mañana, algunas de ellas disparatadas y otras muy interesantes, con personajes que todas y todos conocemos. Tengo que poner en orden las grabaciones que tengo suyas, las de ahora, y las que le hice hace años. Además, igual se viene alguna sorpresita a medias, ya veremos. Aunque para sorpresa, la de haber estado en Berga sin saber que el gran Roc estaba haciendo un nuevo mural, dedicado a la guerrilla del terruño, debajo de los locales de la CGT. Visita obligada para mi próximo paso por el Berguedà.

Aquí termina la parte catalana del mes, unos días en La Rioja para estar con padre, y luego, cambio de mar y caminito al norte, aunque para ser sincero, debería decir, a dormir en diferentes autobuses, a presentar en sociedad al “Tío Manolo” en Cantabria y Asturies. Tengo que reconocer que hacía un sindios de tiempo que no paraba yo en Santander, pero me moló. La presentación era en la librería La Vorágine, una cooperativa interesante con un espacio muy guapo. También aproveché para conocer “la Libre”, otro lugar con solera de la capital cántabra del que había oído hablar muchas veces pero que nunca había visitado. No vino mucha gente pero estuve muy a gusto, y espero que no pase demasiado tiempo antes de repetir visita. Esto fue el miércoles 20 de marzo.

El 21 por la mañana fui a por mi dosis particular de autobús, Santander-Xixón, tres horas y media. Mañana se van mis amigos de Agobio de Bilbao a Gran Canaria y les cuesta solo tres, en fin, es lo que hay. Por la tarde nos fuimos acercando a la cuenca. Me hubiera gustado hacer la presentación en La Semiente, en el Entregu, lugar donde a la gente de La Rioja siempre se nos ha tratado por todo lo alto, y nos han hecho sentir como en casa. Pero la Semiente cerró, tras una docena de años de actividades, durante el mes de junio de 2023, así que la presentación fue en el Castru, en Gargantá, un pueblecito cercano en lo alto del monte, en un nuevo centro que se ha abierto a principios de año. Y estuvo bastante bien, buena gente, lugar muy interesante, y parte de nuestra cuadrilla de la cuenca, además de collacies de otras partes de Asturies como asistencia. Sonrisa en la cara y a dormir a Muñó. Por cierto, comentar que la 2ª edición de El ángulo muerto ya está en imprenta, y saldrá con unas cuantas erratas menos, para alegría de la editorial, mía propia, y de Manolo Huet.

El sábado 23 tocaba Cambalache, en Oviedo. Buen ambiente, buena gente, cena de traje, muy rica por cierto y también algunas caras conocidas. Además, me tocaba encontrarme con Virginia. Entre sus familiares, Constantino García Alonso, de la CNT, apresado por los franquistas y fusilado en Oviedo el 30 de mayo de 1938, o Abelardo Torrijos Fueyo, también anarquista, abuelo de Virginia, quien pudo pasar a Francia, donde le tocó sufrir campos como Argelés o Vernet. Y combatir en la resistencia, aunque en Francia se hacía llamar Belarmino Torres. Y una vez vencidos los nazis, se sumó a las invasiones pirenaicas, y con el mote de Juan Lanas, pasó por la Seo de Urgell, dirigiendo a una cincuentena de guerrilleros. Llegaron hasta Matarrodona, donde fueron rodeados por guardias civiles y falangistas, lugar en el que se desarrolló un intenso tiroteo, que dejó a Abelardo herido de gravedad y en manos de los franquistas… ahora hay que buscar todos los pasos intermedios, a ver si somos capaces. Para quien tenga interés en el tema: https://caudelguille.net/38-myblog/myblog/700-maquis-i-emboscats-12

Y visto lo visto, solo me queda ir agradeciendo (eso sí, a manta) a toda la gente que ha hecho posible que mi mes de marzo haya sido así de bueno. Primero, a las personas y espacios ya mencionados en lineas anteriores, y después, al Javi, Dani, David, Ru, Sol, Charli, Amparo, Joni, Ricard, Jean Marc, Isa, Edu, Ali, Oscar, Carmen, Sandrina, Veru, Delfo, la gente de la cuenca y de Piñeres, Jorge, Puente… y a todas las personas que se me olvidan, pues mi cabeza da para lo que da. Salud, amistad y memoria. Nos leemos el próximo mes.

Y pedir disculpas, pues una vez más, las fotos están sacadas de redes sociales y en general no tengo ni idea de quien las ha hecho.