Falleció en marzo de 1941 en la prisión franquista de Orduña (Vizcaya) y hoy sus restos han sido depositados junto a los de de su mujer Dionisia en el cementerio de San Juan
Detrás de 15 ladrillos y una fina capa de cemento, en el nicho número 183 de la calle N, en el departamento 7 del cementerio de San Juan de Badajoz, conocido como el cementerio Viejo, descansan desde este martes los restos de Salvador del Amo Jiménez, procedentes de Orduña, en cuya prisión franquista pasó sus últimos meses , como su hermano Manuel. A esta cárcel donde los presos sobrevivían en condiciones infrahumanas fueron trasladados Salvador y Manuel tras ser detenidos en Villagonzalo (Badajoz) en abril de 1939, a los pocos días de terminar la Guerra Civil. La contienda había acabado pero quedaban pendientes por resolver demasiados odios.
Salvador murió en el penal el 13 de marzo de 1941 y su hermano Manuel, a los 21 días. 82 años después los dos hermanos han regresado a su tierra, con su familia. Los restos de Manuel están desde ayer en Villagonzalo y hoy los de Salvador han sido inhumados junto los de su mujer, Dionisia, fallecida hace 15 años sin saber dónde estaba enterrado su marido. Salvador tenía 52 años cuando fue condenado por rebelión.
El nieto de Salvador, que se llama como su abuelo, Salvador Del Amo Seguro, ha estado en la delantera de este proceso, en cuanto conoció los planes del Ayuntamiento de Orduña y del gobierno vasco. Este martes ha acudido con su familia, amigos y compañeros de la Asociación de Vecinos de El Progreso al cementerio Viejo, donde la violonchelista emeritense Valentina de la Peña ha tocado el himno republicano de Riego y ‘El canto de los pájaros’, de Pau Casals.
La inhumación de estos restos de represaliados del franquismo está siendo arropada por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura (Armhex), cuyo presidente, José Manuel Corbacho, ha destacado que con este acto lo que se pretende es dar “sepultura digna” a los restos de Salvador, como hicieron el día anterior de su hermano Manuel. “Se cierra así un ciclo, un duelo y es un ejemplo de lo que es la finalidad de las políticas públicas de memoria democrática e histórica, que es tutelar los derechos de estas familias que llevan tantos años buscando y localizando los restos de sus familiares para que reposen en un lugar digno y no en aquel que decidieron sus verdugos hace más de 80 años”. Corbacho constata que será “difícil” encontrar a los 13.000 extremeños desaparecidos, sobre todo porque muchas de las víctimas ya no tienen familiares vivos que demanden su búsqueda, por todo el tiempo transcurrido. En Amrhex confían en que la mayoría sean localizados e identificados. La historia de Salvador Del Amo Giménez invita a la esperanza.
https://lacronicadebadajoz.elperiodicoextremadura.com/la-cronica-de-badajoz/2023/08/01/salvador-descansa-familia-badajoz-82-90551119.html