Ubrique (Cádiz). Hace 85 años asesinaban a Pedro Jiménez Sánchez, zapatero, militante de la CNT

Hace 85 años asesinaban a Pedro Jiménez Sánchez, zapatero, militante de la CNT
Toni Álvar0 / 18.02.2022 / https://www.facebook.com/jaime.perezlopez.16
Hace 85 años asesinaban a Pedro Jiménez Sánchez, zapatero, militante de la CNT, que nunca hizo daño. El menor de cinco hermanos de una familia humilde de Ubrique. Trabajaba en un taller por cuenta ajena y aún le sacaba horas al día para remendar en casa.
Miembro de la Sociedad de Obreros Zapateros, cerrada durante el Bienio Negro, formará parte de su junta directiva como tesorero tras el triunfo del Frente Popular en las elecciones de febrero de 1936. El Frente Popular obtiene en Ubrique el 72% de los votos emitidos.
Tras el golpe de Estado, el alcalde Manuel Arenas Guerrero, masón, hombre de bien que hizo fortuna en Argentina y al volver adquirió un molino para lograr imponer una rebaja en el precio del pan además de facilitar pan y aceite gratis a las familias que no podían pagarlo, pasa el mando al comandante militar de la plaza, al alférez de la Guardia Civil Marceliano Ceballos, que manifiesta su lealtad a la II República y se pone al servicio del Comité de Defensa de la Villa de Ubrique, del que forma parte como vocal Pedro Jiménez.
El Comité se organiza para garantizar el suministro de alimentos y medicinas y evitar la especulación con los productos de primera necesidad. Y se preparan para frenar a las tropas sublevadas. Lo logran el domingo 26 de julio, parando los pies a guardias civiles y falangistas, que dan media vuelta. Al día siguiente, el psicópata Queipo de Llano manda a los Regulares de Infantería al mando del capitán Mariano Gómez-Zamalloa y Quirce, futuro divisionario azul y comandante de la Brunete; reforzados con los falangistas de Manuel de Mora-Figueroa, íntimo de Ramón de Carranza y también futuro divisionario azul. Llevan órdenes claras: sembrar el terror. También llevan ametralladoras y amenazan con bombardear a la población civil. Los defensores de Ubrique se rinden. A Manuel Arenas lo fusilan el 15 de agosto, Asunción de la Virgen María, sin instruir causa alguna. A Marceliano Ceballos, por ser militar, le montan una patraña judicial y lo fusilan el 23 de agosto acusado de rebelión militar, ese concepto que figura en el hit parade de la Historia Universal de la Infamia.
Pedro Jiménez consigue huir por la sierra hacia Málaga. Cuando Málaga cae en poder de los fascistas en febrero de 1937, Pedro Jiménez decide volver a Ubrique porque las nuevas autoridades afirman que ya se les ha pasado el calentón de los primeros días y están de un compasivo subido. Un calentón que les había llevado a fusilar a Alfonso Yuste, un chaval de 16 años; a José García Moreno, de 21 años, que ya no volvería a escribir más coplas de Carnaval en un país devorado por la Cuaresma; a sacar de su chozo a José Gil y Manuela Pardeza, matrimonio sexagenario de campesinos para pegarles cuatro tiros a cada uno; a matar a Manuel Flores, 20 años, frente a su padre, que se desgarraba pidiendo que lo mataran a él…Que bueno, que son cosas que pasan, que ya todo está en calma y todos han aprendido la lección, como Antonio Gómez Frías, que enseñaba a leer a los analfabetos adultos y le volaron la cabeza para quitarle esas ideas absurdas…
Pedro Jiménez estaba en la lista de los miembros del Comité de Defensa a extirpar de la nueva España, que mira que hay que ser inocente para creer en la compasión de los vencedores y que esa inocencia es muestra de culpabilidad y que zapatero a tus zapatos y nosotros a lo nuestro, al paredón y el cementerio, que cada uno planta a su manera. Pedro Jiménez Sánchez, que partió a la sierra, que nunca hizo daño, fue fusilado el 18 de febrero de 1937.
(Para una mayor y mejor información: Después del olvido. Sublevación militar, resistencia republicana y represión en la guerra y posguerra. Memoria histórica de Ubrique (Cádiz). Ubrique, Asociación Papeles de Historia, 2006, compilación realizada por Antonio Morales Benítez y Fernando Sígler Silvera).