«Un Estado que no reconoce miles de muertos durante el franquismo es un Estado deficiente»

► «En Argentina, cada centro clandestino de detención se ha transformado en un espacio de memoria», explica la presidenta de las Abuelas de la Plaza de Mayo

► «Sin rencores, sin odios, pero con una tozudez de que no se puede negociar nada. Quien es asesino, tiene que pagarlo», sentencia

infolibre.es | Álvaro Sánchez Castrillo | 23-6-2015

“Moverla, esa es la única forma de no olvidar la historia”. Así de tajante se mostró este martes la presidenta de las Abuelas de la Plaza de MayoEstela Barnes de Carlotto, durante la rueda de prensa previa a la conferencia internacional La sociedad civil frente a la impunidad de las dictaduras y la lucha por la identinad, que se celebrará este 23 de junio, a las 19.00 horas, en La Casa Encendida, en Madrid, y que está organizada por la Asociación de Mujeres de Guatemala. La argentina añadió que el pueblo español “no tiene que olvidar”, sino que tiene que “juntarse para luchar, sin violencia ni sobresaltos pero exigiendo a los representantes políticos que cumplan con el deseo de la sociedad”.

En este sentido, cuestionada por la actual posición del Ejecutivo del PP, reclamado en más de una ocasión por la ONU para que cumpla la Ley de Memoria Histórica, la presidenta de las Abuelas de la Plaza de Mayo aseveró que ella “sólo puede aconsejar a la población” porque está en un país que no es el suyo. “El Gobierno está puesto porque el pueblo lo votó”, insistió De Carlotto, añadiendo, a renglón seguido, que “un Estado que no reconoce que hubo miles de muertos durante el franquismo, es un Estado deficiente“. A pesar de esto, la argentina apostilló que, en España, “hay un movimiento social muy grande” con una juventud “muy movilizada”. 

Estela de Carlotto se enorgullece de los avances de Argentina en materia de memoria histórica, tras casi diez años de dictadura cívico-militar del autodenominado Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983). En el país del tango, la llamada Ley de Pacificación Nacional, más conocida como ley de autoamnistía –aprobada durante la dictadura militar y que dejaba extinguidas “las acciones penales emergentes de los delitos cometidos con motivación o finalidad terrorista o subversiva, desde el 25 de mayo de 1973 hasta el 17 de junio de 1982″–, fue derogada en 1983 por el Gobierno de Raúl Alfonsín. La abolición de esta norma permitió condenar a Jorge Rafael Videla y a Emilio Massera a cadena perpetua.

Además, en el año 2003, el Congreso Nacional argentino también derogó la Ley 23.492 de Punto Final, otro texto jurídico incubado durante el mismo periodo de la dictadura militar y que protegía a todos aquellos que hubiesen cometido durante estos años delitos de desaparición forzada. “Eran leyes que no nos permitían tener justicia y que nos obligaban a convivir con los asesinos“, explicó emocionada la presidenta de las Abuelas de Mayo, que añadió que ahora “cada centro clandestino de detención se ha transformado en un espacio de memoria”. “Son lugares de vida, de memoria y de formación para los jóvenes”, detalló de Carlotto, algo que, según dijo, hace que se enorgullezca de Argentina y de que su país sea reconocido a nivel internacional en este sentido.

En España hay casi 115.000 desaparecidos, según un informe hecho público por la ONG Rights International Spain (RIS) el pasado mes de agosto con motivo del día internacional de las víctimas de desapariciones forzadas, un término que a la presidenta de las Abuelas de Mayo, que ya llevan casi cuatro décadas buscando a los nietos que la dictadura argentina les arrebató, le parece “siniestro”. “Ahora en mi país tenemos justicia plena. Sin rencores, sin odios, sin venganzas, pero con una tozudez de que no se puede negociar nada, pero sí exigir todo. Quien es asesino, tiene que pagarlo“, concluyó al respecto.

“Un ataque contra la jurisdicción universal”

“Tiene que haber algún lugar del mundo en el que se puedan juzgar estos crímenes, que son contra toda la humanidad, no sólo contra la población local”, aseveró la jurista Mercedes Hernández, presidenta de la Asociación de Mujeres de Guatemala, preguntada por la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que en la práctica acaba con la jurisdicción universal y la persecución, por parte de los tribunales españoles, de violaciones de derechos humanos fuera de nuestras fronteras. “Es un ataque contra la jurisdicción universal, que ha permitido que gente como Scilingo, el militar argentino que arrojó a más de treinta personas desde un avión al Río de la Plata, o Rafael Videla –dictador argentino– hayan podido ser juzgados”, sentenció Hernández, que añadió que es necesario defender este principio “siempre”.

Estela de Carlotto localizó a su nieto el pasado mes de agosto, después de 36 años de búsqueda de ese bebé que dio a luz su hija antes de ser asesinada. Todavía se le entrecorta la voz cuando habla del reencuentro con Guido, que en la actualidad es músico. “Recuerdo que cuando me lo notificó la jueza, que habían encontrado a mi nieto, yo, que soy una persona muy calmada, me puse a gritar de alegría”, relató, añadiendo que se abrazaron en la casa de su hija. “No me atreví a esperarle en la puerta porque me temblaba todo el cuerpo”, contó durante la rueda de prensa, dejando claro que aunque ella “haya podido verlo”, otras muchas compañeras siguen buscándolos. “Seguiremos luchando para encontrar a esos más de trescientos nietos que, a día de hoy, siguen desaparecidos”.

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